Aprobados y suspensos de un Espanyol poco consistente
El equipo, de más a menos, bajó notablemente las prestaciones tras el primer gol del Betis


Dmitrovic. En la línea de toda la temporada, es decir, con un rendimiento notable. Sacó una mano salvadora a un disparo de Fornals y poco (por no decir nada) pudo hacer en los goles béticos.
Omar. Partido muy gris de Omar, sin presencia ni precisión arriba, erró un despeje que supuso el segundo gol del Betis. Un futbolista que está lejos de su mejor nivel y seguramente del nivel habitual del equipo. Necesita volver a ser el Omar de la temporada pasada, por él y por el Espanyol.
Riedel. Un jugador de su edad y de su proyección necesita jugar, y eso implica necesariamente que cometa errores. Contra el Betis quizás alguno más de la cuenta, salió en la foto del primer gol visitante, pero también ofreció muchas cosas positivas, especialmente con el balón en los pies.
Cabrera. El central más fiable del Espanyol. Su regreso al once no impidió los goles béticos, pero sí dotó al equipo de una jerarquía, sobre todo por arriba, que convierte al Espanyol en un equipo más competitivo. Sin errores.
Romero. Mientras el Espanyol mandó en el partido, mientras tuvieron más balón que el rival, Romero brilló. Omnipresente por la banda izquierda en ataque, fue la principal vía que encontró el Espanyol para generar peligro. Puso varios centros con mucha intención.
Pol Lozano. Jugó una primera parte excelsa, más allá de su gran gol con un remate entre una volea y una vaselina. Filtró pases a los delanteros, llevó el tempo del partido y manejó el centro del campo blanquiazul. Seguramente, su mejor actuación de la temporada.
Edu Expósito. Tomó el testigo de Pol cuando el canterano fue sustituido. Un partido en el que fue de menos a más, pero sin ser determinante. Sin balón sufrió más de lo habitual ante un Betis con mucha calidad en el centro del campo.
Pere Milla. Partido bastante intrascendente de Pere Milla, para bien y para mal. No desentonó pero tampoco destacó durante los 60 minutos que estuvo sobre el césped, ya que fue el primer sustituido del partido. Pudo perfectamente haber marcado el 2-0 en tras un centro de Romero pero su remate fue como su partido: discreto.
Puado. Ante el Betis jugó por dentro. Allí se asocia más, tiene más opciones para desarrollar el ataque y está más cerca de posiciones de remate. No es que por banda juegue mal (ni mucho menos) pero por dentro brilla más. Erró un penalti en la última jugada del partido. No lo chutó mal, pero Pau le adivinó las intenciones.
Dolan. Rapidísimo y vertical como siempre, pero con poco impacto en el partido. Puso algún buen centro, pero poco más. Generó amenaza, pero no peligro real. Nada que reprochar a su trabajo sobre el campo.
Roberto. Lo peleó todo, lo remató todo. Trabajo como nadie y como siempre, y le pitaron menos faltas de las que debieron haberle señalado. Se fajó. Solo tuvo un remate claro tras un centro de Omar. Todo lo demás se lo tuvo que fabricar él, llegando siempre muy forzado a las posiciones de remate.
Urko. De más a menos, no logró amarrar el empate ni generar acciones en ataque. Precipitado.
Koleosho. Más activo de lo habitual, salió con ganas y energía.
Kike. No remató ni un solo balón, jugando demasiado lejos del área.
Terrats. Minutos muy flojos.
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