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CÁDIZ 2-ATLÉTICO DE MADRID 0

Aprobados y (muchos) suspensos del Atlético: Memphis, Morata, Saúl, Koke...

Simeone no rotó para pensar en el Inter, pero la apuesta no salió nada bien. Malísima imagen de los rojiblancos antes de una semana clave. Blandos en defensa y muy poco inspirados en ataque.

El once del Atlético ante el Cádiz.
CHEMA DIAZDiarioAS

Simeone había avisado a sus futbolistas de que estaba prohibido despistarse en Cádiz, pero muy pocas cosas le salieron bien al Atlético. El técnico dio continuidad al once y muchos jugadores no estuvieron a la altura. En ataque apenas generó ocasiones y en defensa, como tantas tardes, el primer remate a puerta terminó en gol en contra. Paupérrima imagen del Atlético, que no transmite ninguna buena señal antes de las citas con el Inter y el Barça.

Oblak: Seguramente desde su posición estaría pensando lo que tantas veces ha dicho ante el micrófono tras los sucesivos fiascos del Atleti a domicilio: “Algo hay que cambiar”. Y, como en tantas otras tardes,, el primer remate que le hizo el rival acabó en gol. Poco pudo hacer ante el cabezazo a bocajarro de Juanmi. En el 2-0 no estuvo ni cerca de adivinar el lanzamiento de nuevo de Juanmi.

Llorente: Se asienta en el lateral, pero esta vez estuvo poco inspirado. Escaso bagaje en campo rival y en defensa, aunque estuvo casi siempre firme, vio cómo se originaba la jugada del 1-0 por su parcela. Tras el descanso pasó al centro del campo. En el 72′ tuvo la mejor ocasión rojiblanca, un cabezazo picado que hizo volar a Ledesma. Al menos no es sospechoso de no dejarlo todo en el campo.

Witsel: No estuvo especialmente fiable con la pelota, lo que suele ser su fuerte, y pasó apuros ante la movilidad de Juanmi. Se le vio muy incómodo toda la tarde.

Paulista: Repitió en el once, con ganas de convencer a Simeone para ser titular ante el Inter. Estuvo agresivo en los duelos, pero se le coló Juanmi a la espalda en la jugada del 1-0. En el 2-0 estuvo muy blandito con el toque que le hizo Juanmi en la espalda y se comió el envío largo. Salir en la foto de los dos tantos penaliza su partido.

Hermoso: Muy participativo para iniciar el juego y para avanzar su posición hasta casi ser un centrocampista más. Sin embargo, le costó entenderse con Saúl y se apoyó mucho más en Lino.

Lino: Buenas y constantes conducciones de peligro, pero a la hora de la verdad, muy poco desborde de peligro y muy pocas acciones que intimidaran de verdad al Cádiz. Jugar a pierna cambiada le obliga muchas a veces a centrar sin precisión con la izquierda. Suyo fue el primer remate del Atleti, que no llegó hasta el 27′, pero se lo detuvo Ledesma. Lo intentó mucho, pero de forma intrascendente.

De Paul: Poquita cosa del argentino, cuya versión se aleja preocupantemente de la de hace un par de meses. Demasiadas pérdidas en el centro del campo y pocas conducciones ganadoras. Fue sustituido al descanso.

Koke: El capitán también se quedó corto. En el primer tiempo no cogió el mando del partido y en el segundo, ayudado por Llorente, metió algo más de velocidad, pero insuficiente. Sustituido en el minuto 77.

Saúl: La novedad del once, pero no hizo méritos para reclamar más minutos. La única acción con la que intenta sumar son los desmarques desde el interior hacia el área, pero tampoco lo encontraron sus compañeros. En el centro del campo, ineficaz, especialmente con el balón. Sustituido en el descanso.

Memphis: Su sociedad con Morata no termina de arrancar. El delantero deja controles interesantes, descargas y algún que otro disparo, pero poca cosa. No fue uno de los culpables del desastre, pero no sumó. En el 31′ buscó el empate con una volea que paró Ledesma con facilidad. Cambiado el descanso.

Morata: Apenas se le vio en el primer tiempo, más allá de algún balón peinado hacia Memphis. El mal juego de su equipo tampoco le ayudó. En el 72′ le faltó finura ante un balón repelido por Ledesma y remató muy lejos del portería. El Atleti necesita que recupere su versión de otoño.

Sustituciones del Atlético en Cádiz

Riquelme: Entró tras el descanso junto a Nahuel y Correa y se puso como interior derecho. Buenos minutos, con calidad y toques precisos, pero se desinfló.

Nahuel Molina: Trató de dar profundidad en la banda derecha. La amarilla que vio, muy exagerada, le condicionó para robar balones.

Correa: Acompañó a Morata en punta y al menos trató de desbordar y generar peligro con sus giros. Poca cosa.

Vermeeren: Entró tras el 2-0 para reconstruir el centro del campo. Buena actitud y personalidad para pedir la pelota y moverla de primeras. Viendo lo que hay, merece más.

El Jebari: Debut en el minuto 77 en busca de la remontada.

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