Lewandowski tiene una pena
La estrella de Polonia y el Barcelona encadena dos penaltis fallados y una expulsión en sus tres últimos partidos. Con la selección, sigue negado en los Mundiales tras su sequía en Rusia-18.
Es uno de los grandes reclamos de Qatar 2022. De hecho, si se atendiera exclusivamente a la reciente clasificación del Balón de Oro, se trata de la segunda mayor estrella en esta Copa del Mundo: quedó cuarto, y tanto el primero como el segundo –Karim Benzema y Sadio Mané– se pierden la cita por sendas lesiones. Y del mejor delantero, trofeo Gerd Müller por sus 57 goles en 56 partidos de la pasada temporada. Y, sin embargo, para Robert Lewandowski el Mundial comienza con una pena máxima.
Incapaz fue el ariete del Barcelona de convertir el penalti cometido por Héctor Moreno, en el encuentro de Polonia ante México (0-0), este martes, por lo que le negó la victoria a su selección en un grupo cuya primera jornada resultó explosiva por el inesperado triunfo de Arabia Saudí sobre Argentina (1-2). Casualidad o no, la parada de Guillermo ‘Memo’ Ochoa no hacía sino culminar –o continuar– una racha corta pero temible de quien durante sus primeros meses como jugador del Barça había mantenido, sino elevado, el sobresaliente nivel que había exhibido tantos años en el Bayern de Múnich.
Antes de su error frente a México, y habida cuenta de que Czesław Michniewicz lo reservó en el amistoso de la semana pasada entre Polonia y Chile (1-0), venía Lewandowski de otras dos actuaciones para olvidar. El 5 de noviembre, en el Camp Nou, había fallado otra pena máxima, esta vez lanzándola directamente fuera ante la mirada de Fernando Martínez, el guardameta del Almería.
Y solo tres días más tarde, en El Sadar, era expulsado por doble amarilla a los 31 minutos, con el agravante de que el árbitro Jesús Gil Manzano, y posteriormente el Comité de Competición, consideraron que se despidió con un gesto de menosprecio que le acarreará tres partidos de suspensión a la vuelta del Mundial (ante Espanyol, Atlético de Madrid y Betis), salvo que prospere el recurso del Barcelona.
No logra anotar el polaco desde el pasado 29 de octubre, en el minuto 93 del Valencia-Barça, completando así los 13 goles en Liga y cinco en Champions que acumulaba hasta el parón. Tampoco anota a nivel de selección desde el 8 de junio, ante Bélgica, puesto que se marchó de vacío en los siguientes tres compromisos de la Nations League.
Pero, más allá de lo presuntamente anecdótico, la otra pena máxima de Lewandowski se encuentra en la Copa del Mundo. Además del México-Polonia de este martes, en Qatar, al atacante se le negó el gol en su anterior cita mundialista, la de 2018 en Rusia, cuando disputó todos los minutos posibles con su selección, los 270 de la primera fase, pero no vio portería ni ante Senegal, Colombia, ni Japón.
Dispone ahora de otros dos encuentros, como mínimo, para deshacer esa estadística impropia de uno de los mejores delanteros del mundo. La sorprendente Arabia Saudí aguarda el sábado. Y el siguiente miércoles, la Argentina de Lionel Messi, uno de sus enormes oponentes en el álbum de cromos mundialista, igualmente instruido en el arte de errar penaltis. Y de convertirlos, como ante los sauditas, aun con estériles consecuencias.