MARRUECOS | PABLO FRANCO

El ex del Real Madrid que ha resucitado a un grande de Marruecos

El MAS Fez vuelve a soñar de la mano del técnico español Pablo Franco, que ha devuelto competitividad y orgullo a un histórico del fútbol marroquí.

El ex del Real Madrid que ha resucitado a un grande de Marruecos
Martín Manchón
Actualizado a

Pablo Franco es uno de esos entrenadores españoles que han dejado huella en cada rincón del mundo por el que han pasado. El técnico madrileño, que formó parte del cuerpo técnico de Julen Lopetegui durante su breve etapa en el Real Madrid (también dirigió en Primera al Getafe), ha desarrollado una carrera internacional que abarca Europa, Asia y África. En este último continente ha consolidado su reputación gracias a sus experiencias en Tanzania (Simba SC) y Sudáfrica (AmaZulu). Tras dirigir al Al Faisaly en la Segunda División saudí, Pablo Franco asumió el reto de revitalizar a un histórico del fútbol marroquí, el MAS Fez, al que ha devuelto la competitividad y la ilusión.

Fundado en 1946 en la ciudad imperial de Fez, el Maghreb Association Sportive de Fès (MAS Fez) es uno de los clubes más históricos de Marruecos. Conocido por su afición apasionada y su tradicional camiseta amarilla y negra, ha ganado múltiples títulos nacionales, incluyendo el campeonato marroquí y varias Copas del Trono. En el plano continental, alcanzó su cima al conquistar la Copa Confederación de la CAF y la Supercopa de la CAF en 2011, consolidando su prestigio como uno de los grandes referentes del fútbol marroquí y del norte de África. Después, el club descendió a Segunda y, a excepción de la temporada 2021/22, cuando logró acabar cuarto en Liga, su afición no ha vuelto a lamer las mieles del éxito. Hasta ahora.

Porque con Pablo Franco (y su asistente, el también español Aitor van den Brule) en el banquillo, el MAS Fez, campeón de la Primera División de Marruecos en 1965, 1979, 1983 y 1985, está recuperando su estatus de antaño. El club es considerado uno de los fundadores del fútbol marroquí, desempeñando un papel pionero al ser el primer equipo no francés en alcanzar el cuadro final de la Copa de Francia antes de la independencia de Marruecos, enfrentándose al histórico Red Star de París. Aquel hito convirtió al Maghreb Fez en un símbolo de orgullo nacional y marcó el inicio de una relación profunda entre el club y su ciudad. Desde entonces, el MAS ha representado el espíritu combativo y cultural de Fez, una urbe que respira historia, arte y pasión por el fútbol.

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Ocho décadas después, esa identidad parece haber resurgido con la llegada de Pablo Franco, que tiene al equipo líder de la Botola Pro (Primera División de Marruecos) y tras cinco jornadas no conoce la derrota. Bajo la dirección del técnico español, el equipo está volviendo a ilusionar a una hinchada que llevaba años sin motivos para soñar. La afición, una de las más fieles y bulliciosas de Marruecos, ha encontrado en el técnico madrileño un líder que combina rigor táctico con cercanía y compromiso. No es de extrañar, por tanto, que Pablo Franco se haya ganado el respeto —y el cariño— de todo Fez.

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