Amat ya es indonesio: “Me apetece mucho este reto”
La Cámara de Representantes de Indonesia aprobó su solicitud para obtener la ciudadanía, lo que significa que pronto podrá debutar con la selección del país en el que nació su abuela.
La vida de Jordi Amat (Barcelona, 1992) ha dado un giro de 180 grados en los últimos meses. El central barcelonés se estrenó como padre y posteriormente cambió de equipo, de país e incluso de continente. “Estoy en una etapa totalmente nueva”, descubre desde Malasia, su nueva residencia desde el pasado mes de julio, cuando firmó por tres años con Johor Darul Takzim, uno de los clubes más poderosos del Sudeste Asiático. Y, por si fuera poco, Jordi Amat también ha cambiado de nacionalidad: tras unos meses de espera, la Cámara de Representantes de Indonesia aprobó su solicitud para obtener la ciudadanía -junto a la de Sandy Walsh, jugador del Malinas belga-, lo que significa que pronto podrá debutar con la selección del país en el que nació su abuela: “Mi ilusión ahora es hacer carrera en Asia. Soy muy joven, me siento bien tanto física como mentalmente y me apetece mucho este reto”, desvela el defensor con pasado en Espanyol, Rayo o Betis.
A pesar de contar con ascendencia indonesia, Jordi Amat no pisó el país asiático hasta hace tan solo unos meses. “Quedé impresionado para bien. La gente es muy amable y me ha ayudado en todo lo que he necesitado. Eso sí, hace mucho calor. Me preocupaba la adaptación, pero hice un ‘training camp’ con la selección y fue muy bien. Me sentí muy cómo con el equipo y pude ver que tenemos muchos chavales jóvenes con muchísima calidad. Quieren formar una selección potente y por eso estamos aquí Sandy y yo. Esperamos que vaya todo bien”, descubre Amat, que podría volver a unirse a la concentración de Indonesia pero tendrá que esperar el ‘ok’ de la FIFA para poder debutar en partido oficial. No será, eso sí, su estreno como internacional pues pasó por todas las categorías inferiores de la selección española: jugó con la Sub-16, la Sub-17, la Sub-18, la Sub-19, la Sub-20 y la Sub-21.
Tras China e India, Indonesia es el país más poblado de Asia. Cuenta con casi 280 millones de habitantes, algo de lo que Jordi Amat se percató cuando anunció su intención de jugar con el equipo actualmente dirigido por Shin Tae-yong. “No he dejado de recibir mensajes y comentarios. Instagram es una locura. Tenía 35 000 seguidores y ya he superado los 320 000″, analiza el jugador de Johor FC, boyante por formar parte del club más grande de Malasia: “Me sorprendió para muy, muy bien. Cuando supe que podía venir a Johor no lo dudé ni un momento, el propietario -Tunku Ismail, príncipe del sultanato de Johor- es un visionario, quiere que el club sea lo más grande posible. Es su pasión y como persona es encantador. Y he de decir que no juega mal al fútbol”, descubre Amat, que lo pasó mal cuando se le acusó de querer la nacionalidad indonesia para firmar con Johor -las plazas para extranjeros son limitadas-: “La gente habló sin saber. Elegí Johor porque me encantó su proyecto y el ‘boss’ -así llaman a Tunku Ismail- me convenció. No podía decir que no. Además, aquí estoy a hora y media de Yakarta y puedo desplazarme fácilmente para los partidos internacionales. Si estuviera en España o Bélgica tardaría 24 horas en llegar”.
La experiencia, al menos de momento, está siendo “muy bonita”. “Todo es positivo”, agrega Amat, que debutó en la AFC Champions League con Johor y lo hizo, además, en una posición en la que es poco habitual, la de mediocentro: “El primero que me probó ahí fue Laudrup en el Swansea y contra el Manchester United. Recuerdo que faltaba gente. Me dijo: ‘Perdona, pero te tengo que poner de ‘6′’. Yo le dije: ‘Tranquilo, yo juego donde tú me digas’. En el Betis, con Setién, también jugué algún partido en el centro del campo. Corres más, pero también tienes más balón y mucha responsabilidad”. Johor cayó goleado (0-5) ante Urawa, pero el partido quedó grabado en su historia pues fue la primera vez que alcanzó los octavos de la máxima competición continental. “Fue una experiencia muy bonita y aprendimos mucho. Johor es un club ambicioso y, con el tiempo, quiere competir en la Champions. Llegar a semifinales o incluso ganarla”, descubre Amat.
Que Johor compita en Asia es solo uno de los grandes nuevos retos de Jordi Amat, que también espera convertir a Indonesia en una de las selecciones más importantes del continente. “Va a ser una experiencia brutal. Estoy descansando mucho, comiendo bien y preparándome para todos estos nuevos desafíos. Queremos hacer que un país de la grandeza de Indonesia esté orgulloso de su selección. Allí la gente se vuelve loca con el fútbol. Hay partidos de liga a los que acuden 50 o 60 000 espectadores, imagínate a los de la selección”, describe Amat, ansioso por ponerse a las órdenes de Shin Tae-yong y debutar con el país en el que nació su abuela. El central nacido en Barcelona no se estrenará en los amistosos ante Curazao del parón de septiembre, pero sí estará en la convocatoria de Indonesia para la AFF Championship, un torneo organizado por la Federación de Fútbol del Sudeste Asiático que se disputará el próximo mes de diciembre.