Con 11 o con 10, pero con Rayane

El Atleti B se vio con el partido dominado, con un torrente de ocasiones, con razones para pensar que esta vez sí… y sí, ganó. La expulsión de Boñar (43’) parecía complicarle la faena al filial, pero nada más lejos. El comodín rojiblanco es Rayane Belaid, cuya presencia compensó cualquier inferioridad. La roja cambió el partido, pero más aún el golazo del 20. El Hércules, que no empezó bien y tampoco aprovechó el diez contra once, apenas pudo ya cuando Romera también fue expulsado. El notable ejercicio de fútbol y coraje devuelve a los de Torres al vagón de cabeza.

De inicio, el filial despachó uno de sus mejores arranques de la temporada. Prácticamente a oportunidad por minuto. Desde cerca, desde lejos, a balón parado o en jugada hilvanada. Hubo jugadas con hasta tres disparos rojiblancos. Pero faltó, claro, el gol. Martín, Kostis, Jano, Rayane, Omar Janneh… El goteo de remates era constante, pero el Hércules resistió y se entonó, a juntar pases y a acercarse a Iturbe, al que comenzó a probar desde lejos.

La noche entró en un tramo valle, más calmado, porque encima llovía con mucha fuerza en el Cerro del Espino. Y cuando parecía que la primera parte se esfumaba, con todos pensando ya en resguardarse de la lluvia, Boñar se hizo un lío en el área. El defensa intentó cubrir un balón hasta la línea de fondo, pero Nico se lo rebañó y se lo dio a Romera, que obligó a Iturbe a hacer un paradón con el pie. A la vez, el árbitro enseñó la segunda amarilla a Boñar por pedir falta. Nuevo escenario para el segundo tiempo, diez contra once.

Rayane irrumpe entre el aguacero

Pero el guion del segundo tiempo empezaba con un giro inesperado. Rayane, que sigue de dulce en 2025 y volvió a ser el mejor del equipo, recogió un balón en la frontal, amagó y lo puso con un toque sutil y de rosca junto al palo. Gol de mucho mérito y a apretar para defenderlo. Porque ya sí, con uno más, el Hércules achuchó, más por empuje que con lucidez. En la más clara, Iturbe volvió a ganarle el duelo a Romera, desviando con los dedos un mano a mano que terminó en el palo. En la siguiente, en un intento de chilena que terminó en juego peligroso, Romera vio la segunda amarilla e igualó fuerzas.

Diez contra diez, el Atleti B vio la luz y empezó a invadir con frecuencia el campo del Hércules. Rayane se plantó ante el portero tras un gran envío de Julio Díaz, pero el juez de línea lo paró por un milimétrico fuera de juego. El filial ni siquiera notaba la fatiga, con Rayane inspirado y los jugadores de la banda izquierda percutiendo. Desde allí llegó la primera ocasión clara que tuvo Janneh, pero cruzó demasiado el remate. En la siguiente, tras un pase filtrado por Rayane, obligó al paradón de Carlos Abad.

El Hércules apretó, a la fuerza ahorcan, con centros laterales que exigieron a Kostis, Martín y Dani Martínez, pero la noche era del Atlético B, que se ganó los puntos con mucho mérito y mucho esfuerzo y se cuela de nuevo en puestos de playoff, justo delante de los alicantinos y a la espera del resto de la jornada.

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