MÁLAGA
Las dudas se apoderan del Málaga
Sus dos últimos tropiezos ante Intercity y Ceuta le han relegado a la cuarta plaza y le dejan a diez puntos del Castellón, líder, al que recibe este domingo en La Rosaleda (20:00).
El Málaga ha empezado 2024 con muy mal pie y recuperando viejas dudas del pasado que han puesto el proyecto en entredicho. Los dos tropiezos ante Intercity (2-2 y gracias) y Ceuta (3-2) le han alejado del liderato hasta los diez puntos. El equipo blanquiazul ha sido zarandeado en los dos últimos encuentros y parece haber perdido el tono y, sobre todo, el rumbo en los partidos. Claramente inferior a sus dos últimos rivales, sólo ha logrado sumar un punto con más fortuna que fútbol en los minutos finales del partido ante el Intercity.
Los cinco goles encajados en dos encuentros constituyen un dato preocupante. El Málaga ha perdido seguridad defensiva, hay jugadores cuyo nivel ha bajado en este inicio de 2024 y el equipo lo está acusando. El centro del campo, muy castigado por las lesiones durante todo el curso, también ofrece síntomas inquietantes. Juanpe no termina de arrancar, Sangalli aún está lejos de su mejor nivel, Genaro continúa sancionado, Manu Molina deja detalles de su calidad pero Pellicer le mantiene como opción para las segundas partes principalmente y únicamente Dani Lorenzo parece haber elevado sus prestaciones en las últimas semanas.
Arriba las carencias son las ya conocidas. Pellicer sólo dispone de Roberto y Dioni y el ansiado delantero que se busca en el mercado sigue sin llegar. En las bandas, sin Haitam y ahora también sin Kevin por lesión, está ganando protagonismo el joven Cordero, pero aún es demasiado pronto para concederle semejante responsabilidad. Lo mismo sucede con otros chavales que prometen mucho como Izan Merino o Aarón Ochoa, pero cuyos procesos deben llevarse con cautela. Larrubia no termina de romper y la aportación hasta ahora de Juan Hernández ha sido escasa.
A todo ello hay que sumar que la actitud y la intensidad en determinados momentos de los últimos partidos no ha sido ni mucho menos la idónea. Consecuencia: el Castellón visitará el domingo La Rosaleda con diez puntos de ventaja. Queda media temporada por delante, pero todo lo que suponga un tropiezo reducirá a la mínima expresión las opciones de ascender como campeón de grupo.
La plantilla está cogida con alfileres y el equipo ha perdido parte de su esencia en las últimas semanas. También están en tela de juicio algunas de las decisiones que se han tomado en las últimas jornadas desde el banquillo. Pellicer se ha visto obligado a deshacer parte de su plan de forma drástica en los descansos de los últimos encuentros. El técnico realizó en el intermedio dos cambios ante el Intercity y tres frente al Ceuta.
Desde el club se transmite un mensaje de tranquilidad y confianza, pero lo cierto es que los cinco puntos que se han quedado por el camino en este arranque de año escuecen y mucho. El Málaga afronta ahora el partido ante el Castellón (domingo, 20:00) bajo presión y obligado a sumar tres puntos.
La presión, por supuesto, también está presente en los despachos. Las carencias de la plantilla, sobre todo en la parcela ofensiva, son más que evidentes desde que comenzó la temporada y con medio mercado invernal ya superado siguen sin llegar los refuerzos a La Rosaleda. El Málaga necesita fichajes. Y no futbolistas de relleno, sino jugadores que suban el nivel y sean importantes en la segunda mitad del curso. Y a Loren Juarros y a su equipo se les acumula el trabajo. Los blanquiazules se han quedado sin margen de error sobre el césped y también en el mercado. La reacción debe ser inmediata o el objetivo irrenunciable del ascenso a Segunda División puede verse seriamente en peligro.
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