El CSD frena su denuncia a Louzán hasta las elecciones

El Consejo Superior Deportes recula en su intención de bloquear la candidatura de Rafael Louzán a la presidencia de la Federación Española de Fútbol. El gallego no gusta como candidato al tener en su contra una condena (recurrida ante el Supremo) por prevaricación y que le inhabilita durante siete años a un cargo público. El CSD llevaba semanas deslizando que denunciarían su candidatura por el interés general, pero la realidad es que sin Miguel Ángel Galán, alias Querellator, no tienen margen jurídico para ser ellos los que impugnen ante el TAD su candidatura. Según fuentes del Gobierno, estudiarán la opción de impugnar su nombramiento si el lunes 16 es elegido como nuevo presidente.

A Louzán se le despeja el camino en la recta final de la carrera electoral. La semana pasada logró quitarse de enemigo a Miguel Ángel Galán, presidente de la escuela de entrenadores CENAFE y quien con sus denuncias inició la caída de Villar, Rubiales y Rocha, al pactar darle licencia UEFA a los técnicos que se saquen el título en academias que no sean la federativa. Ahora, el Consejo Superior de Deportes tampoco será un obstáculo de cara al día de las elecciones. Según adelantó El País y ha podido confirmar AS, no denunciará su candidatura como pretendían hacer. Su lectura es que con la condena de inhabilitación a cargo público, no cumple el reglamento de la RFEF.

El problema para bloquear la candidatura de Louzán está en que el Gobierno afirma que no puede hacer nada en este punto. Pero esperarán a las elecciones para estudiar entonces si pueden hacerlo si el gallego resulta elegido. Aunque para entonces uno de sus miedos ya estaría cumplido: una persona con una condena por inhabilitación llegue a la presidencia y que en febrero, cuando resuelve el Supremo definitivamente, se tenga que volver a elegir a un nuevo mandatario. Aunque Louzán, por su parte, espera salir absuelto entonces y que su nombre quede limpio tras varias semanas en la que ha sido señalado.

La opción de impugnar a Louzán como candidato fue tan probable que se llegó a buscar un plan B. De esta forma, salió la candidatura de Merchán, barón extremeño. Ahora, también con Gomar en la carrera a la presidencia, será el fútbol español, a través de los jugadores, los clubes, árbitros y entrenadores, los que decidan quién será el próximo presidente. Lo que quería la RFEF, que se den elecciones y los actores de este deporte sean los que decidan democráticamente.

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