Vitinha se ‘baja’ del Balón de Oro
“Para mí, es Dembélé quien lo merece este año”, dice en Ligue1 + el portugués, también favorito. El conjunto parisino hará campaña por el francés para el 22 de septiembre.


El PSG ya ha comenzado la campaña para que Ousmane Dembélé sea el próximo Balón de Oro. El conjunto parisino cuenta con nueve nominados, récord junto al Real Madrid en 2018, y la división de voto puede beneficiar a Lamine Yamal, el otro gran favorito. Por ello, algunos de sus compañeros, como Vitinha, también han abogado para que el francés reciba el prestigioso galardón el próximo 22 de septiembre.
El portugués concedió una entrevista a Ligue 1 +, la plataforma de Streaming de la liga francesa, en la que aseguró que Ousmane Dembélé merece ganar el Balón de Oro. “Ganar el Balón de Oro sería increíble, pero creo que el que más lo merece es Ousmane Dembélé. Es el hombre que verdaderamente nos ha guiado hasta el final para ganar los títulos que hemos conseguido, Y, para mí, en mi opinión, es él el que merece ganarlo este año. Es verdad que todo el mundo sueña con lograr un Balón de Oro un día. Si me llega el premio, sería increíble”, dijo al ser preguntado respecto a la posibilidad de ser elegido el mejor jugador del mundo.

La campaña empezó hace tiempo. Ni una hora había pasado de la consecución del título más importante de la historia del PSG, la Champions League en Múnich, cuando Luis Enrique fue meridiano al ser preguntado por el Balón de Oro: “Ousmane Dembélé, para mí, lo merece claramente”, apostilló el técnico asturiano, que después ratificó sus palabras en el Mundial de Clubes. El conjunto parisino lo tiene claro. Hará una campaña hasta el 22 de septiembre, fecha en la que se entrega el prestigioso galardón por France Football, para decidir el voto en favor del que ha sido una de las claves para proclamarse campeón de Europa.
La división de voto puede jugarle una mala pasada al PSG, que cuenta con nueve jugadores, todos sus titulares excepto Marquinhos y Pacho, entre los 30 nominados a llevarse el premio más prestigioso del mundo del fútbol. Por ello, los servicios de comunicación del club ya están trabajando para intentar desequilibrar la balanza hacia un jugador, francés, que cuenta con el apoyo popular de todo el país y que, además, jugará en casa, ya que la ceremonia del Balón de Oro se celebra en pleno corazón de la capital francesa, en el Teatro de Châtelet.
A comienzos de julio, Al Khelaïfi dijo que “sería un problema si Ousmane Dembélé no merece el Balón de Oro”, unas palabras que zanjaron definitivamente la postura de un PSG que, por ejemplo, podría haberse inclinado por otros jugadores capitales para ganar la Champions, como Achraf Hakimi o Vitinha. El hecho de que sea francés pondera ostensiblemente a la hora de postularse públicamente, pero su temporada, con 49 participaciones de gol, 35 goles y 16 asistencias, amerita una consideración para que París haya desplegado todas sus armas para intentar persuadir a los periodistas que sigan estando indecisos a la hora de votar.
La entrevista que concedió el exjugador a France Football, justo antes del Mundial, en la que dijo que siempre soñó con estar nominado para ser el mejor jugador del mundo, se encuadró dentro de la campaña que inició el PSG nada más acabar la Champions. “Dembélé Balón de Oro”, cantó Marquinhos en los Campos Elíseos, a la que se unieron al unísono todos sus compañeros y todos los aficionados presentes en la conocida avenida de París. También, sorprendentemente, apareció en Roland Garros para ofrecer a los hinchas del tenis la Orejona, desatando la locura en la capital francesa.
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A pesar de la campaña del PSG y de que Francia quiere a Dembélé como Balón de Oro, el jugador se ha mantenido cauto, sereno, y no ha querido enarbolar la bandera de que merece ser el mejor jugador del mundo. En todas sus comparecencias, el internacional francés ha reiterado que lo más importante “es el equipo” y, ni siquiera al ser preguntado directamente por el trofeo, quiso asegurar que quiere ganarlo y que se ve como favorito. El club, sin embargo, lo tiene claro. No quiere que se divida el voto y apostará sus cartas ganadoras a que el Mosquito, que ahora, por fin, pica y mucho, sea ungido como el rey de París el próximo 22 de septiembre.
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