Un Galatasaray de Champions
El actual campeón turco se ha reforzado con once incorporaciones ‘de nivel’ para encarar una temporada en la que vuelven a Champions y defienden el título liguero.
El Galatasaray ha vuelto. Después de que hace dos años terminaran en una de sus peores posiciones en liga (13º), consiguieron remontar el vuelo la pasada temporada y volvieron al trono de la Superliga turca perdiendo tan solo cuatro partidos. Pero en la ciudad del Bósforo todo va a más.
Besiktas y Fenerbahce son más que candidatos al título liguero, como siempre, y ante el apasionante curso pasado de los del barrio de Galata, han incorporado figuras de renombre. Ahora bien, los campeones no se iban a quedar atrás.
En este mercado de fichajes han llegado: en defensa, Angeliño (cedido), para el lateral izquierdo que quedaba cojo, junto a Ayhan, defensa central internacional con Turquía que ha sido fichado del Sassuolo, y Davinson Sánchez. En el centro del campo, Ndombélé y Kerem Demirbay, del Tottenham y Bayer Leverkusen respectivamente. Y en la delantera, Ziyech, Zaha, Tete (Shakhtar), Bakambu, y ya se han quedado con Icardi a cambio de 10 millones. También esperan la llegada de otro centrocampista tras caerse la operación de Matías Vecino.
Estos nombres se suman a los principales partícipes de la hazaña de la temporada pasada: el lateral derecho francés Sacha Boey, el central danés Nelsson que quería el Sevilla, Torreira, Sérgio Oliveira, Mertens, Aktürkoglu, el mítico Muslera… Y Okan Buruk en el banquillo, leyenda viva de la entidad.
Una plantilla para volver a convertir el RAMS Park en el añorado ‘infierno turco’ de las noches europeas. No tienen un grupo fácil, ya que pertenecen al Grupo A, donde también se encuentran Manchester United, Bayern y Copenhague, pero no se les podría descartar de una manera tan fácil teniendo en cuenta el citado ‘factor cancha’.
Una previa de UCL dura, temprana, y larga
El 25 de julio, el conjunto turco arrancó jugando las previas de Champions en Lituania, para acabar clasificándose el pasado 29 de agosto. Con la plantilla a completar, y tras derrotar al Zalgiris, Olimpija Ljubljana y Molde, están de vuelta. Las sensaciones no han sido las mejores, y han manifestado una carencia total de control en el centro del campo.
Habrá que ver la evolución de este equipo con la llegada de Ndombélé, que el año pasado se salió en el Nápoles, con la vuelta de lesión de Sérgio Oliveira, y con la más que posible incorporación de otro medio, pero la ilusión y los futbolistas de renombre del fútbol europeo vuelven a Estambul.