CLASIF. EUROCOPA | ESCOCIA-ESPAÑA
Steve Clarke, el escudero estrella de Mourinho
El seleccionador escocés, Steve Clarke, ha sido durante años un cotizado ayudante en el fútbol inglés. Fue segundo de Robson, Dalglish, Benítez, Hogdson, Avram Grant...
Bobby Robson, José Mourinho, Kenny Dalglish, Roy Hogdson, Rafa Benítez... todos ellos han recurrido a Steve Clarke (59 años, Escocia) como su mejor escudero. Todos lo han querido a su lado. Muchos desconocerán que el actual seleccionador escocés tiene una dilatada carrera en el fútbol inglés como lugarteniente de grandes entrenadores. Ahora con Escocia vive su momento de popularidad con estatus de heroe tras clasificar a Escocia a una Eurocopa tras 25 años ausente. Un reconocimiento que le lleva al escocés a sus 59 años cuando para muchos es un desconocido, aunque en realidad está detrás de muchos de los éxitos de la primera época de José Mourinho al frente del Chelsea.
La carrera de Steve Clarke comenzó en el Newcastle, cuando el Siglo XX daba sus últimos coletazos. Fue ayudante de Ruud Gullit y Bobby Robson en Las Urracas. En el Newcastle se estrenó como entrenador interino en 1999 en una partido de Premier con mal recuerdo: el United de Ferguson le endosó un 5-1.
Fue en el año 2000 cuando se cruzó otra vez por su vida el Chelsea. Los blues fueron el equipo de su dilatada carrera como jugador (once temporadas entre 1987 y 1998 como lateral derecho). Ya como técnico entró a formar parte de la cantera del Chelsea hasta la llegada de Jose Mourinho a la caseta del Stamford Bridge. El portugués le cambió la vida. Como su ayudante consiguió todos los éxitos posibles. De él aprendió cómo se lleva un vestuario lleno de egos. A la marcha de Mourinho, se quedó en el club como lugarteniente de Avram Grant en la final de Champions de 2008. Su labor era tan respetada que Scolari le quiso a su lado en su experiencia como técnico en el Chelsea, pero la llamada de su ‘amigo’ y compañero Gianfranco Zola le obligó a cambiar de aires y marcharse al Aston Villa.
Liverpool, Kilmarnock y Escocia...
En 2010, el estatus de Steve Clarke como entrenador ayudante era muy cotizado. Su compatriota Kenny Dalglish lo reclamó para el Liverpool. Luego también trabajó para Roy Hogdson y Rafa Benítez entre 2010 y 2012. Siempre aprendiendo de los más grandes, hasta que en 2012 le llevó su oportunidad defitiva como entrenador en jefe. Estuvo al frente del West Bromwich Albiol durante temporada y media en la Premier (entre 2012 y 2013). Después dio un paso más en el Reading, con el que firmó uno de sus primeros hitos en la dirección, al clasificar al modesto equipo hasta la semifinales de la FA Cup en 2015.
No fue hasta 2017 cuando le llegó la oportunidad de dirigir al Kilmarnock de su país de origen. Su buen hacer con el club escocés llamó la atención de la Federación que en 2019 no le dejó escapar. La mejor de las oportunidades después de años entregado a los demás. Y desde entonces no ha hecho más que hacer historia, clasificando a los escoceses para la Eurocopa 2021 dejando por el camino a Serbia. Ahora se cruza con España. Su ocasión para atraer los focos casi por primera vez.