Bellingham ‘entierra’ a Haaland

El cambio de ciclo en Alemania es más posible que nunca. El Borussia Dortmund es líder de la Bundesliga (con un partido más) y amenaza un dominio del Bayern que ya se extiende por una década. Pocas veces en estos años estuvo tan cerca algún equipo del gigante bávaro entrado ya el mes de marzo, y la dinámica del conjunto que dirige Edin Terzic es fabulosa.

El Dortmund ha ganado los 12 encuentros disputados en 2023, incluidos el de Champions ante el Tottenham y el de Copa que le condujo a cuartos, lo que le ha permitido recortar la distancia en Bundesliga ante el Bayern y ponerse incluso por delante en la tabla. Algo inimaginable cuando a principio de temporada arrancó sin su gran estrella de los últimos años, Erling Haaland, traspasado al Manchester City en uno de los movimientos más sonados del mercado de verano.

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En las dos campañas y media que estuvo Haaland en el Dortmund hizo 13, 27 y 22 goles respectivamente. No solo eso. Se convirtió con su voracidad en uno de los delanteros más temibles y cotizados del mundo. Sin embargo, no fue suficiente para desbancar al Bayern de lo más alto de la Bundesliga. Con Haaland en el club, el Dortmund fue segundo en dos ocasiones y tercero en otra. Todos los campeonatos acabaron en Múnich.

Bellingham, clave

El impulso de los de Terzic como equipo llega también después de haber sufrido el contratiempo de la ausencia por enfermedad de Haller. El destinado a ser sustituto de Haaland en el ataque estuvo varios meses fuera por un tumor testicular. Es más, el club reaccionó rápido y adquirió a Modeste como solución de emergencia.

Una vez recuperado Haller, el ataque empieza a ordenarse -incluso con las lesiones de Adeyemi y Moukoko-. Jugadores como Bellingham han dado un paso al frente definitivo. El Dortmund es una cosa muy seria. Más, incluso, que cuando estaba el mismísimo Haaland.

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