Scolari vuelve del retiro para una nueva aventura

La de Luiz Felipe Scolari con el fútbol parece una de esas historias que llevan al lado el símbolo de infinito. Difícil saber qué pasa por su cabeza cada vez que le proponen un reto, aceptando sin lugar a dudas para ayudar a cualquier equipo que necesite de su ayuda para mirar con fuerza lo que viene a lo largo de la temporada. El técnico brasileño, finalista de la Copa Libertadores con Athletico Paranaense en 2022, anunció poco después de caer derrotado en la final ante Flamengo que ponía punto y final a su carrera en los banquillos. Un camino largo, con un recorrido con altos y bajos, pero que sin lugar a interrogantes dejaba sembrado un gran éxito, y sobre todo una imagen muy reconocible.

Con una experiencia de 40 años tras la línea de cal, parecía hasta lógico que el técnico, que tuvo tiempo tanto de entrenar a nivel internacional como a nivel de clubes, dijera adiós a lo que más ha amado. Una dedicación que no ha tardado en volver a saltar al foco futbolístico dentro de la liga brasileña. Porque aunque parezca mentira, a sus 74 años, Scolari volverá a sentarse en un banquillo.

Después de la separación por sorpresa entre Chacho Coudet y Atlético Mineiro, en el Galo no se han quedado de brazos cruzados para buscar un sustituto que se haga al cargo del equipo que ha dejado el argentino. Con Coudet dejando unos grandes resultados en este 2023, en el conjunto brasileño han optado por la experiencia y veteranía. Lo que inició como un rumor no ha tardado en confirmarse, y Felipe Scolari será el entrenador del club de Belo Horizonte hasta diciembre de 2024 (o al menos ese ha sido el contrato que ha firmado).

Iniciar una lista de todos aquellos logros que ha tenido Scolari a lo largo de su carrera daría inicio a un conjunto de puntos casi infinitos. Lo importante es que el veterano técnico volverá a entrenar y dirigir, algo que en noviembre cuando hizo el anuncio de su retirada parecía difícil de imaginar. Y es que, como sucedió por ejemplo en Europa con Roy Hodgson, parece que al entrenador que se acaba marchando siempre le acaba ‘picando’ algo para retomar su contacto con el fútbol de una manera más directa. La situación de Atlético Mineiro en Brasil es buena... y quién sabe si con Felipão acabará siendo mejor.