Sarabia es un ejemplo

La temporada del Wolverhampton se prevé durísima para mantener la categoría en la Premier, pero el técnico, Gary O’Neil, ha vuelto a la fórmula que más rendimiento le ha dado desde que llegó al cargo, la fórmula Pablo Sarabia. El extremo zurdo español fue titular ante el Southampton y marcó el primer gol del equipo en una victoria fundamental.

Después de un arranque de temporada en el que no había tenido demasiada continuidad, la relevancia del internacional por España se notó desde el primer momento: gol a los 2 minutos (el más rápido de la historia de los Wolves en la Premier) y camino allanado hacia el triunfo. La afición de Molieux volvió a corear su nombre pues sabe que es uno de los futbolistas de la plantilla más diferenciales.

El curso pasado, en una situación parecida -pues hasta muy entrada la temporada no tuvo continuidad-, hizo cuatro goles y fue clave en la salvación final de los Wolves. En esta, las cosas van por el mismo camino. Con él, todo es más sencillo.

Eso sí: la mala noticia fueron los problemas en el gemelo que hicieron que no pudiera concluir el choque. Sarabia comenzó a notarlos en el primer tiempo y al descanso tuvo que ser retirado. En cualquier caso, el trabajo estaba hecho y en la segunda mitad llegó la sentencia de Cunha para dejar en casa tres puntos vitales.

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