Odisea en Boca

Mientras la temporada del fútbol argentino va acudiendo a sus instancias finales, en Boca Juniors la tranquilidad no asoma por ninguno de los rincones de Buenos Aires. El subcampeonato en la Libertadores supuso un golpe anímico dentro de la entidad Xeneize, que por sorpresa visualizó cómo Jorge Almirón dejaba el cargo de entrenador y ponía sobre interrogaciones lo que sucedería hasta que acabara el curso. Con la disputa de la Copa de la Liga Profesional todavía vigente, el empate del conjunto de azul y dorado ante San Lorenzo no hace más que poner baches al futuro del equipo, que puede llegar a temer hasta por su participación en la próxima Copa Libertadores de 2024.

En la Copa de la Liga, Boca se encuentra con 12 puntos dentro de su grupo. Ocupando la posición 11, el equipo de Buenos Aires se encuentra a seis puntos de Racing y Belgrano (conjuntos que cierran las posiciones para disputar el play-off final). A falta de dos partidos, no depende de ellos estar entre los cuatro primeros pese a que obtuvieran esos seis puntos, teniendo la necesidad de ganar sus dos partidos (frente a Newell’s y Godoy Cruz), y esperar a que La Academia y el Pirata caigan en sus dos enfrentamientos.

Ante la dificultad de una sorpresa en este sentido, el equipo de dirigido por Mariano Herrón tiene una oportunidad también en la Copa Argentina. Ante la búsqueda de un técnico por parte de la entidad, el Xeneize se enfrentará en las semifinales durante este mes de noviembre a Estudiantes por un puesto en la final. El vencedor de la competición tendrá un cupo directo hacia la próxima edición de la Libertadores. Actualmente, la opción más viable.

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Otro caso que podría dar cabida a Boca en su objetivo por alcanzar la máxima competición sudamericana después de ser subcampeón, sería la de alcanzar en la tabla anual los puestos que clasifican al torneo. Siendo los cuatro primeros los que la disputarán, debido a que River Plate libera una plaza, el equipo bonaerense se encuentra actualmente con 56 puntos en el octavo puesto, posicionándose a tres puntos de Rosario Central (cuarto clasificado).

Por todo ello, la situación actual de Boca es algo caótica. A las puertas de unas nuevas elecciones en el mes de diciembre, su camino hacia la próxima Libertadores casi se está convirtiendo en una odisea. Y aunque tiene varias vías por las que poder volver a presentarse entre los mejores del continente, la idea de que el torneo no cuente con uno de sus máximos campeones se plantea como algo muy extraño.

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