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CASO SUPERLIGA | ROCA Y VAQUERO

“No es una victoria absoluta de la Superliga como venden”

Toni Roca y Jorge Vaquero, especialistas en derecho deportivo, valoran el fallo judicial del TJUE sobre el Caso Superliga.

LUXEMBURGO, 21/12/2023.- Captura video del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que consideró este jueves que las normas de la FIFA y de la UEFA sobre la autorización previa de las competiciones de fútbol de clubes, como la Superliga, violan el Derecho de la Unión. EFE/CAPTURA DE VÍDEO
EFE

El terremoto que ha supuesto la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre el ‘Caso Superliga’ que sostiene que existe un “abuso de poder dominante” de FIFA y UEFA ha abierto un debate a raíz de la interpretación de la misma. En este contexto, conviene dar voz a especialistas en derecho deportivo para que ofrezcan luz al fallo judicial. “No es un escenario de victoria absoluta como venden. La sentencia dice que no se puede prohibir la creacíón de competiciones por ser abuso de poder dominante y que las sanciones no se pueden imponer. Con las normas actuales esto está claro, porque lo que está pasando es contrario a esa norma, pero si hubiera otras normas más trasparentes quizá sí tendrían derecho a la prohibición y eso es lo que refleja la sentencia en su conclusión. Es una circunstancia que no se da, por lo tanto sólo se analiza lo actual: que lo de ahora es un abuso y hay una posición dominante”, asegura Toni Roca, experto en derecho deporivo.

Roca considera que la prohibición de nuevos torneos con la normativa actual era inviable: “Lo que hay ahora discriminatorio, no puedes impedir competiciones paralelas ni puedes sancionar. Es como si Google sanciona a un cliente por hacer lo mismo que él. Por lo tanto, ahora mismo, yo como club elijo entre las ofertas que tengo para recalar en la mejor competición. Tengo dos ofertas y usted no me puede sancionar por escoger la otra”.

UEFA y FIFA, eso sí, deberán cambiar cosas para adaptarse a lo que dice la sentencia: “Ahora no pueden decidir sobre otros. Si estas decisiones acaban estando sujetas a lo que dice la sentencia, si son proporcionales y no discriminatorias, quizá sí podría impedirlo. Lo importante de la sentencia no es crear una competición, que ya se podía, sino no ser sancionado por ello. Que no tengan el reconocimiento de UEFA y FIFA le dará igual a la Superliga porque ni clubes ni jugadores recibirán sanción. Gana fuerza la Superliga”, concluye Roca.

“No es una victoria absoluta de la Superliga como venden”

Jorge Vaquero, de VS Sport Legal, sostiene que la sentencia es favorable para la Superliga, pero señala algunos matices a tener en cuenta. “¿La sentencia es favorable a la Superliga? Por supuesto, porque entiende que las medidas que tienen establecidas tanto UEFA como FIFA es una normativa para limitar o restringir la entrada de nuevos competidores. Entienden que vulneran la libre competencia y la normativa sobre particular prevista en el catálogo fundacional de la Unión Europea tal cual están ahora mismo previstas esas normas. Y esto es importante recalcarlo: la sentencia no se refiere a la validez o a la conveniencia de la Superliga. De hecho, hay un pasaje en el que dice que un proyecto como el de la Superliga no tiene por qué ser objeto de aprobación. Es la única vez que se refiere a la Superliga. Se refiere, únicamente, a estas normas de FIFA y UEFA. Tal cual están redactadas, se dice que no son transparentes y que no son proporcionadas. Y, por tanto, tienen que modificarse. Modificarse, ¿en qué sentido? Pues modificarse de forma objetiva para que los clubes o las entidades que quieran organizar competiciones deportivas en el marco de la Unión Europea conozcan con carácter previo cuáles son los requisitos que exigen UEFA y FIFA para poder aprobar esas competiciones. Ahora mismo no hay criterios, depende todo de la voluntad discrecional de FIFA y de UEFA, y ese es el problema. Ese es el tirón de orejas que le pega la sentencia a UEFA y FIFA: usted prohíbe, pero no dice por qué, no dice cuáles son los requisitos para que usted no prohíba. Le está diciendo que tiene que establecer esos requisitos y que tienen que ser objetivos y proporcionados para no resultar contrarios a la normativa sobre competencia”, asevera.

Sobre si la Superliga es una opción real y en qué plazos se puede ver su nacimiento, se muestra más escéptico. “No va a ser de la noche al día ni mucho menos. Va a pasar un tiempo entre otras cosas porque los derechos de la Champions se encuentran comprometidos durante varias temporadas y va a tardar en estabilizarse esta vorágine inicial. Falta por ver qué pasa con los clubes ingleses, los alemanes también se han desmarcado del proyecto... Para que eche andar queda bastante tiempo. Sí que se abre la puerta a que la Superliga se pueda establecer. En cuanto al formato, todo tiene su base en el informe del abogado general de la UE, en el que decía que el modelo de deporte europeo, tal y como está concebido, donde se reserva el protagonismo a las entidades federativas, se basa en la apertura de las competiciones, en la distribución de la riqueza de arriba hacia abajo... y es lo que se achacaba a la Superliga. Al modificar el formato se ha dado entrada a 64 clubes, en lugar de los 12 o 14 iniciales, establece divisiones, posibilidad de ascenso y descenso, y además han dicho que distribuirán una cantidad cercana a los 400 millones de euros entre clubes no participantes. Lo que pretenden es ajustarse a esas instrucciones que le daba el abogado general de la UE en el informe. Un informe que, por otra parte, la sentencia conocida hoy no lo ha tenido en consideración”.

Por último, sostiene que la convivencia de Champions y Superliga es imposible: “Hoy día, posible jurídicamente no lo es porque la normativa de la UEFA no lo permite. Pero la UEFA, por este pronunciamiento, va a tener que modificar esta normativa. Casi con total seguridad no va a abrazar la llegada de la Superliga, sino que va a tratar de establecer nuevas restricciones más objetivas y proporcionadas, pero que en cualquier caso supongan más piedras en el camino para la Superliga porque al fin y al cabo, son entidades antagónicas que muy difícilmente van a poder convivir o coexistir, salvo que se sienten a negociar y lleguen a un entendimiento en base al cual los clubes tengan un protagonismo que hasta ahora no han tenido”.

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