Müller, como un debutante

Un rival de Segunda división como el Ulm siempre debe ser cómodo para un gigante como el Bayern, pero que tu primer partido de la temporada sea uno eliminatorio fuera de casa siempre es un peligro. Se encargó de que no se notase como tal Thomas Müller. El delantero, de 34 años, está empezando su decimosexta temporada con el club de Múnich, pero celebró como un debutante los dos goles que sirvieron para encarrilar la clasificación.

Kompany respiró aliviado porque tenía mucho que perder y poco que ganar. Sacó un once lleno de titulares... pero sin ninguno de los nuevo fichajes. Sí Stanisic, aunque este ya pertenecía al club. Pero la papeleta la resolvieron Kimmich y Kim. El primero, con una jugada individual en la que llegó al área y disparó forzado. Ahí estaba Müller para hacer bueno el rechace. El Bayern va a agradecer mucho que Kompany le devuelva al centro del campo. Apenas tres minutos después, en el 15′, el coreano dio un gran pase largo a Gnabry, que solo tuvo que darle el pase de la muerte al veterano delantero para sentenciar el partido.

La afición pedía ver a las caras nuevas y Kompany se lo concedió. En el minuto 77 dio entrada de golpe a Olise y a Palhinha. Más de cien millones sobre el campo que se vieron reflejados cuando Olise recibió un balón largo, llegó hasta línea de fondo y asistió a Coman, que se reivindica ante los rumores de salida. Quedaría tiempo en el añadido para que el goleador del equipo, Kane, marcase el suyo. De cabeza. A pase de, quién si no, Thomas Müller.

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