Motín de Lukaku
El delantero belga quiere permanecer en Milán y “no se presentará al entrenamiento del Chelsea en Cobham”, según la ‘Gazzetta dello Sport’. Su intención es abaratar los 40 millones de euros de su traspaso.
Al Chelsea se le presenta otro problema en plena operación salida. Tras las complicaciones surgidas en el traspaso de Hakim Ziyech al Al-Nassr, el siguiente quebradero de cabeza para la directiva blue tendría nombre y apellido: Romelu Lukaku. El delantero belga, cedido la pasada campaña al Inter de Milán, no quiere volver a enfundarse la elástica del conjunto londinense y habría decidido revelarse para forzar su salida del club.
Según la Gazzetta dello Sport, Romelu Lukaku “no se presentará al entrenamiento del Chelsea y ni siquiera volará a Londres”. Aquellos jugadores que se concentraron con sus respectivas selecciones nacionales tras la conclusión de la temporada liguera gozaron de unos días más de vacaciones que el resto de sus compañeros, pero el ariete belga “no se presentará al entrenamiento en la base del Chelsea en Cobham” como forma de presión hacia la directiva blue.
La intención del todavía jugador propiedad del Chelsea es abaratar el precio de su traspaso. El cuadro londinense pretende al menos recuperar 34 milones de libras (en torno a 40 millones de euros) de los 115 M€ que pagaron en 2021 por su fichaje. Y es que Romelu Lukaku, a diferencia de N’Golo Kanté, Kalidou Koulibaly y Edouard Mendy, rechazó la posibilidad de poner rumbo a Arabia Saudí, ya que su deseo es permanecer en el Inter de Milán.
Mauricio Pochettino, que tomó las riendas del equipo el pasado lunes 3 de julio, podría sumar la de Romelu Lukaku a la importante lista de salidas que ya se han producido en Stamford Bridge. A Kai Havertz, Mason Mount, Mateo Kovacic, Ruben Loftus-Cheek, César Azpilicueta y los tres nuevos jugadores de la liga saudí mencionados anteriormente estarían cerca de unirse próximamente tanto Christian Pulisic como el propio delantero belga.