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ITALIA

La “injusticia” que clama la Juve solo es el comienzo

Los bianconeri, unidos contra los 15 puntos de castigo de ayer, pueden enfrentarse a otro juicio deportivo y en marzo arrancarán el periplo en la justicia ordinaria.

El escudo de la Juventus en su estadio.
MASSIMO PINCAREUTERS

La Juventus recibirá mañana al Atalanta, una cita cuyo sentido ha cambiado por completo en las últimas 24 horas. Los 15 puntos de sanción alejan de manera casi definitiva de la zona Champions a los bianconeri, que aún esperan poder recuperarlos en el Comité de Garantía del CONI. La entidad anunció que recurrirá y sus abogados, con un comunicado, fueron muy duros en contra de la decisión de la Corte de Apelación de la FIGC: “Solo a la Juventus se le atribuye la violación de una regla que la misma justicia deportiva había reconocido no existir. Se trata de una evidente injusticia también hacia millones de apasionados”.

Hoy el técnico Allegri, en rueda de prensa, intentó transmitir tranquilidad: “Solo vamos a pensar en el campo y el partido de mañana es fundamental para acercarnos al séptimo puesto. Lo que ocurre en los juicios es tema del club y habrá un recurso, nosotros debemos ganar”. El nuevo presidente Ferrero y el consejero delegado Scanavino, esta tarde, se reunirán con los jugadores bianconeri, que se posicionaron en las redes sociales apoyando a su club. El capitán Bonucci le envió un mensaje a la hinchada: “La Juve es como un dragón con siete cabezas, si cortas una siempre crece otra. Nunca se rinde, y su fuerza está en su ambiente”. Los tifosi viven como una injusticia el castigo de estas horas, sobre todo porque los otros clubes implicados, ayer, fueron todos absueltos. La situación de la Vecchia Signora, no obstante, era distinta.

El serbio Dusan Vlahovic se sumó a los mensajes de sus compañeros en redes sociales y aseguró que el equipo, tras los quince puntos de sanción: “No tenemos miedo de unos pocos puntos menos en la clasificación. No tenemos miedo de arremangarnos. No tenemos miedo de nuestros adversarios. No tenemos que tenerle miedo a nada. Porque cuando piensen que hemos caído, nos levantaremos más fuertes que antes. Estos somos nosotros. Esto es el Juventus”, expresó tajante en su cuenta de Instagram.

Sus problemas empezaron en el verano de 2021, cuando la Consob, autoridad administrativa que vigila sobre las sociedades que cotizan en la Bolsa, empezó una verificación sobre “naturaleza y tratamiento contable de los contratos de traspaso y adquisición” de futbolistas. Bajo la lupa de la autoridad acabaron 215 millones de euros en plusvalías y, a partir de allí, comenzó la larga investigación de la Fiscalía de Turín, ‘Prisma’.

El trabajo de los fiscales de Turín ha llevado a las dimisiones del presidente Agnelli y de toda su junta directiva y abrió varios frentes legales. El de ayer surgió porque, gracias a las escuchas entre los directivos bianconeri, la Fiscalía de la FIGC explicó que en las conversaciones intervenidas entre el 14/07/2021 y el 25/11/2021 hay una referencia directa “explícita y con un claro tenor de confesión” sobre un verdadero sistema de plusvalías realizadas con trueques cruzados de futbolistas y jóvenes futbolistas, en los que la Juve y otro club, intencionalmente, perfeccionan las operaciones con el único objetivo de realizar valores en los balances establecidos anteriormente”.

A la espera de la motivación de la sentencia, todo indica que la cantidad de operaciones y el “sistema plusvalías” ayer condenaron a una Juventus que, pronto, podría comenzar otro juicio deportivo por el aplazamiento de los sueldos de sus jugadores en las temporadas 19/20 y 20/21, tema que involucra también la famosa carta Cristiano. El próximo 27 de marzo, además, comenzará el periplo en la justicia ordinaria con la audiencia preliminar por la investigación Prisma, en la que la Fiscalía acusará al club y 12 investigados de falsas comunicaciones sociales, obstaculización al trabajo de las autoridades de vigilancia públicas, manipulación del mercado y declaraciones fraudulentas con el uso de operaciones inexistentes. A todo eso hay que sumar las posibles sanciones de la UEFA. La confederación, el pasado 1 de diciembre, abrió un expediente por “potenciales violaciones de los reglamentos de las licencias para los clubes y del juego limpio financiero”. La sentencia de ayer solo es el comienzo de un año de batallas legales para la Vecchia Signora.