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Eurocopa 2024

La Eurocopa de los modestos

Albania, Moldavia, Israel, Kazajistán, Armenia y Luxemburgo, en la pelea por jugar la Eurocopa. Los albaneses, los únicos que han jugado alguna vez una fase final.

La selección de fútbol de Albania celebra la victoria ante Polonia.
ADNAN BECIAFP

EI topicazo tiene casi tantos años como el fútbol. Cada vez que un equipo de los ‘grandes’ se enfrenta a uno menor, el favorito, en un alarde de respeto y, por qué no decirlo, para justificar un posible fracaso, suelta aquello de “todos los rivales son complicados, y más ahora”. Pues bien, en esta fase de clasificación para la Eurocopa de Alemania 2024, el tópico es prácticamente una certeza. Selecciones como Moldavia, Israel y Kazajistán tienen en su mano clasificarse por primera vez en su historia al torneo continental. Otras como Albania, que lo jugó en 2016, lideran su grupo por delante de equipos con mucha más tradición como República Checa y Polonia. La rebelión de los modestos ha llegado.

Albania

La líder del grupo E con 10 puntos, dos más que República Checa y Moldavia y cuatro por encima de la Polonia de Lewandowski. Su entrenador es Silvinho, exjugador de Barcelona y Celta, cuyo ayudante es Zabaleta, otro viejo conocido. Juntos han hecho de la selección albanesa la gran revelación de la fase de clasificación a la Eurocopa. Su gran estrella es Asllani, del Inter, pero también tiene jugadores repartidos por las grandes ligas como Djimisti (Atalanta), Hysaj (Lazio), Balliu (Rayo) y Uzuni (Granada), entre otros. Viene de ganarle a Polonia (2-0) y si vence a República Checa en el próximo partido prácticamente habrá sellado su billete a Alemania 2024.

Moldavia

También en el grupo E, tiene los mismos puntos que la República Checa, aunque ha jugado un partido más. Desde la refundación del país, que hasta 1991 formaba parte de la URSS, su selección nunca ha estado tan cerca de jugar una fase final de un gran torneo. También ganó a Polonia y empató con los checos. Le quedan tres partidos, pero tiene un calendario difícil: Polonia, Albania y República Checa, en ese orden. Ninguno de sus jugadores tiene un valor de mercado superior al millón de euros según Transfermarkt.

Israel

El fútbol israelí vive el momento más dulce de su historia. En los dos últimos años, la misma generación de jóvenes se ha proclamado finalista del Europeo Sub-19, conquistó el bronce en el Mundial Sub-20 y fue semifinalista en el pasado Europeo Sub-21, logrando también su billete a los JJ OO de París 2024. Ocupa la tercera posición del Grupo I, a tan solo un punto de Rumanía y a tres de Suiza. Sus dos estrellas son Gloukh, del Salzburgo, y el portero del Bayern Peretz. Weissman, del Granada, también es uno de los hombres fuertes de la selección israelí.

Kazajistán

La pelea por el liderato del Grupo H es la más ajustada de toda la fase de clasificación. Eslovenia y Dinamarca son colíderes a un punto de distancia de Finlandia y de la sorprendente Kazajistán, cuya victoria a la selección danesa en marzo reventó todas las casas de apuestas. Nunca se ha clasificado para la fase final de ningún gran torneo y ninguno de sus futbolistas juega en las grandes ligas.

Armenia

Joaquín Caparrós dejó cimentadas las bases de la selección armenia, que con el técnico andaluz obtuvo la mejor racha de su historia. Un año después de su salida, Armenia es tercera del Grupo D, a solo tres puntos de los líderes Turquía y Croacia, que el lunes sufrió para vencer a los armenios por la mínima (0-1). Spertsyan, del Krasnodar, es su jugador con mayor valor de mercado: 12 millones de euros. Tampoco disputó nunca una fase final.

Luxemburgo

A pesar de haber sido goleada por Portugal en el último partido (9-0), Luxemburgo aspira a arrebatarle la segunda plaza del Grupo J a Eslovaquia, que le saca solo tres puntos. Con jugadores como Leandro Barreiro (Mainz) y Martins Pereira (Spartak Moscú) en el medio del campo y el ex de Norwich y Wigan Daniel Sinani en la delantera, los luxemburgueses sueñan con hacer historia y jugar una fase final por primera vez en su historia.