INGLATERRA
La estrategia del Chelsea, al descubierto
Bild analiza la política de fichajes del presidente de los blues, Boehly, que está obsesionado con la Bundesliga. Después de Nkunku, Bellingham es prioritario.
Lejos de frenar su avalancha inversora después de un desembolso inicial en fichajes de 300 millones de euros, el Chelsea seguirá fichando, con especial hincapié en la Bundesliga. Así los desvela el diario alemán Bild, que analiza la política de traspasos del nuevo presidente del Chelsea, Todd Boehly. El empresario es norteamericano pero tiene raíces alemanas y suele reunirse en Londres con el máximo mandatario del RB Leipzig, Oliver Mintlaff, con el que ya ha cerrado varias operaciones.
Después de una división interna en el Chelsea, posterior a la compra del club, Boehly se comprometió a llevar las riendas durante cinco años. Más tarde, expertos en la parcela deportiva como Petr Cech y Marina Granovskaia abandonaron el club y Boehly no encontraba un nuevo director deportivo, así que asumió el cargo de director deportivo, aconsejado por los agentes más influyentes de Europa y su exentrenador, Thomas Tuchel. Sin embargo, según el mismo diario alemán, Boehly se habría dado cuenta de que la Bundesliga es lo más parecido a la Premier League por su juego físico y táctico.
Es más, Boehly se hubiera llevado a Nkunku el verano pasado, pero Mintzlaff utilizó una artimaña y consiguió renovar al francés sin cláusula con la promesa de dejarle salir el próximo verano por 60 millones de euros. Por eso antes de noviembre las firmas de su traspaso y su contrato deberían llegar antes de noviembre.
Y no es el único que llegaría de Leipzig porque el Chelsea puso hace tiempo sus ojos en Gvardiol y se espera que el próximo verano invierta más de 80 millones por el central croata, lo que dejaría más de 150 millones en las arcas de los alemanes. Pero lo más descabellado es que puede que no sea la mayor inversión de los blues, que planean un doble golpe para su medio del campo.
Bellingham y Rice para reeditar el medio del campo de Inglaterra
Jude Bellingham es el objetivo más claro del Chelsea y de ahí que Boehly esté dispuesto pagar al menos 120 millones de euros por el centrocampista del Borussia Dortmund, con una larga lista de pretendientes que incluye al Real Madrid y al Liverpool. Y algo parecido sucede con Declan Rice, por el que el West Ham pide 170 millones de euros, y con el que Boehly podría reeditar el doble pivote de la selección inglesa.
La lista de objetivos empieza a ser interminable y Benjamin Pavard también está entre los objetivos del Chelsea. El defensa del Bayern de Múnich (otro de la Bundesliga) acaba su contrato en 2024 y ya estuvo en la órbita de los londinenses el pasado verano. Todo esto antes de que Boehly nombre a un director deportivo, con Christop Freund (RB Salzburgo) y Tim Steidten (Leverkusen) como principales candidatos.