Insaciable Cristiano
El 7 lidera a su país ante la Dinamarca pos-Hjulmand. Roberto Martínez se fía de su nivel goleador: “Está aquí por lo que es, no por lo que ha sido”. Vitinha y João Neves, nuevos directores del juego portugués.
Copenhague acoge un partido entre Dinamarca y Portugal, dos proyectos jóvenes y con ciertas semejanzas, pero en etapas diferentes. Ambos están haciendo el relevo de unas generaciones históricas (Schmeichel-Eriksen-Kjaer y Cristiano-Pepe-Bernardo) a otras con valores más altos de colágeno en sus pieles (Jörgensen-Dorgu-Hojlund y Mendes-Neves-Vitinha). La diferencia es que, mientras que Roberto Martínez ya lleva dos años en el cargo y alcanzó los cuartos de la Eurocopa, Brian Riemer apenas ha dirigido dos partidos con la Absoluta de los que no ha ganado ninguno. La sombra de Hjlumand es alargadísima.
Con razón el exentrenador del Anderlecht avisó en la previa de que conoce su condición de no favorito y que la plantilla de Portugal tiene mucho más talento que la suya, pero insistió en que no saldrá a defender, sino a igualar el partido, que son dos conceptos diferentes. Por el camino ha perdido a Hojbjerg y Roerslev. Uno de los retos de Riemer en esta nueva etapa será recuperar la mejor versión de Hojlund, ese delantero que marcó seis goles en sus seis primeros partidos con la selección... y que ahora encadena doce sin celebrar. Para consuelo danés, en el United es igual.
Muy diferente es quien tiene enfrente. No lleva el 9, pero, en palabras de Roberto Martínez, es el mejor goleador del equipo. “Cristiano está en la selección no por lo que ha sido, sino por lo que es”, explicó el español en The Coaches’ Voice esta semana, alegando sus 17 goles en 21 partidos bajo la tutela del español.
La leyenda portuguesa encabezará a un equipo que cuenta cada vez con una mejor sala de máquinas. El gran nivel colectivo del PSG esta temporada se explica en gran parte a los sobresalientes Vitinha (“el maestro del fútbol europeo”, en palabras de Roberto Martínez) y João Neves. Así como el gran momento de forma de Bruno Fernandes, de lo poco salvable del United. Bernardo Silva viajó, pero se retiró del último partido con el City cojeando. Sin embargo, ayer su técnico afirmó que todos entrenaron frescos e intensos.
El míster de Balaguer debe mejorar la imagen mostrada en la Eurocopa, donde el resultado no fue malo, pero su juego sí fue decepcionante. Hasta ahora, ha ganado más que divertido. Y hoy en Dinamarca es una noche propicia para hacer ambas.
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