Infantino se une en Barcelona a la lucha de Brasil contra el racismo
El presidente de la FIFA visitó este jueves a la Seleçao en la Ciudad Condal, y charló con Vinicius, a quien ofreció liderar una comisión de futbolistas. “Necesitamos castigos más duros”, solventó.
‘Com racismo não tem jogo’ (Con el racismo no se juega) es el lema del encuentro que este sábado (21:30) medirá en Cornellà, en el rebautizado como Stage Front Stadium, a Brasil y Guinea. Un partido claramente marcado por episodios de racismo de los que ha sido víctima Vinicius Júnior, quien igual que el resto de sus compañeros vestirá de negro todo el primer tiempo para visibilizar esta lucha. Pero no estarán solos. Este jueves al mediodía aterrizó en Barcelona nada menos que el presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
“Para mí, como presidente de la FIFA, el mensaje es claro: paramos ya, ‘finito’, basta. Tenemos que actuar de una manera mucho más contundente, fuerte, pero también trabajar juntos”. Así fue el discurso que Infantino pronunció en el hotel de concentración de Brasil, ante toda la plantilla, cuerpo técnico y directiva de la CBF, después de reunirse con el presidente de la misma, Ednaldo Rodrigues, y de charlar con Vinicius en una de las salas de actos. La selección le regaló una camiseta de Brasil con el dorsal ‘9′ a la espalda.
“Es muy importante no sólo hablar sino actuar, de manera decidida y contundente contra el racismo, contra toda forma de discriminación. Tolerancia cero absoluta”, se significó más tarde el presidente de la FIFA, en unas declaraciones distribuidas por la CBF. “La FIFA está junto a la CBF y los jugadores en esta lucha. Vamos a crear nuevas propuestas para terminar ya con la discriminación”, añadió.
Incluso fue más allá Infantino, a su salida del hotel, al desvelar: “Le pedí a Vinicius que lidere este grupo de jugadores que presentará castigos más estrictos contra el racismo que luego serán implementados por todas las autoridades de fútbol del mundo. Necesitamos escuchar a los futbolistas y lo que necesitan para trabajar en un entorno más seguro. Lo tomamos muy en serio”, manifestó a la agencia Reuters, donde culminó: “Necesitamos castigos más duros”.
Por su parte, Rodrigues explicó algunos de los protocolos que en Brasil se están implementando. Como el que lleva a los árbitros, en caso de alerta racista, a “parar el juego e identificar al delincuente que está en medio de los aficionados, y tomar medidas”. También se refirió a la creación de un comité de deportistas que fueron víctimas de episodios racistas, “para que el mundo entero se pueda unir a la propuesta”.