Indonesia estaba pendiente de una inspección de FIFA para el Mundial Sub-20
El país tiene previsto albergar la competición masculina entre mayo y junio de 2023. Estaba inmerso en preparativos.
![Aficionados invaden el terreno de juego mientras que la policia trata de frenarles sin mucho éxito.](https://img.asmedia.epimg.net/resizer/v2/5OZMCB6Z75BT3OEPTM35OSBOOA.jpg?auth=94aca7cb8d573b99b7a97b58411bc4ac96c38f2d012a2998e4a0ab227aa90146&width=360&height=203&focal=892%2C821)
La tragedia del estadio Kanjuruhan, en la Java Oriental, acontece en un momento muy delicado para Indonesia. El país tiene previsto albergar durante los próximos meses de mayo y junio el Mundial Sub-20 masculino. El comité organizador estaba inmerso en los preparativos, con mucha actividad en las últimas semanas, coordinado con las autoridades locales. “No solo queremos albergar partidos de fútbol, sino también presentar a Indonesia. Queremos mostrar a los países participantes que Indonesia es capaz de ser un buen anfitrión”, afirmaba hace algo más de una semana Zainudin Amali, ministro de Juventud y Deportes, en Yakarta.
El golpe ha sido durísimo porque FIFA tenía previsto durante el mes de octubre, según informan fuentes indonesias, una nueva inspección de los preparativos. En el próximo mundial Sub-20, a disputarse entre el 20 de mayo y el 11 de junio, participarán 24 selecciones. El comité organizador había propuesto seis estadios para la cita. El estadio principal Bung Karno de Yakarta; el estadio Jakabaring de Palembang; el estadio Si Jalak Harupat de Bandung; el estadio Manahan de Solo, el estadio Gelora Bung Tomo de Surabaya y el estadio Captain I Wayan Dipta de Bali. El estadio Kanjuruhan, donde ha tenido lugar la tragedia, no estaba incluido en esa lista.
La situación es muy comprometida. FIFA, de momento, únicamente remite a la declaración oficial de condolencia de su presidente, Infantino, sobre la pérdida de vidas humanas. Mientras, Jokowi, presidente de Indonesia, ha ordenado a la Asociación de Fútbol de Indonesia (PSSI) suspender temporalmente la liga después de lo sucedido en Kanjuruhan “hasta una evaluación y mejora de la seguridad”. Más aún, después de que su ministro de Seguridad Mahfud reconociera que, al respecto de la celebración del partido entre el Arema FC y el Persebaya Surabaya, se habían realizado advertencias al comité organizador del mismo sobre el aforo y la hora de celebración del encuentro que no fueron atendidas.