Ilicic reaparece en el Maribor
El atacante volvió a jugar un partido profesional con el Maribor y marcó un penalti. Intenta reconducir su vida en su país natal.
Josip Ilicic ha sido uno de los jugadores más icónicos de la Atalanta de Gasperini. El esloveno, lleno de clase, fue una pieza clave desde que llegó y los aficionados del Valencia le recordarán porque, en febrero de 2020, les marcó cinco goles para eliminarles de la Champions League.
Un mes más tarde, el mundo cambió y su vida empezó a hacerlo. En junio el fútbol se reanudó, pero Ilicic no podía recuperar la normalidad. De hecho, se perdió los históricos cuartos de final de la Champions League contra el PSG. “Ilicic tuvo coronavirus y lo sufrió mucho, cayó en depresión. La cabeza llega un momento que te explota”, explicó su compañero Papu Gómez meses más tarde en TyC Sports.
Poco a poco recuperó la forma y pudo jugar temporada y media, pero los problemas regresaron. Gasperini, antes de saber que esta vez sería la definitiva, dijo: “No es fácil hablar de esta situación para mí. Siempre estaremos al lado de Josip, es algo que va más allá del fútbol. La cabeza es una jungla para los psicólogos, imagínense para nosotros...”. No pudo alienarle más hasta la última jornada, cuando le sacó en los últimos minutos para que se despidiese de la afición italiana. “Los médicos no nos dan respuestas y no puedo darlas yo. Hablo de eso ahora para no volver a hablarlo más. Es algo muy delicado”.
Ilicic decidió firmar por el Maribor (por donde ya pasó en 2010) hace unas semanas y este domingo por fin pudo debutar. Con 4-1 en el marcador, su técnico, Damir Krznar, le dio unos minutos para que volviera a sentirse futbolista. Le dio tiempo a hacer una gran jugada en el área que por poco es penalti, dar un pase espectacular a Baturina que le dejó mano a mano con el portero y a provocar él mismo un penalti. En el 89′ llegó a revivir lo que es ser la estrella del partido marcando un gol de penalti.
“Estoy feliz por Josip, que finalmente pudo jugar. O, mejor dicho, el público pudo ver al gran maestro. Demostró en pocos minutos el gran jugador que es. Todavía se nota que necesita kilómetros en las piernas, así que en los próximos días pasará más tiempo con el preparador físico”, explicó su entrnenador.
Un final feliz para un jugador que espera poder volver a conseguir la salud mental que todos los futbolistas quieren antes que cualquier título. Maribor es la segunda ciudad más importante de su país y su equipo el club más laureado del país con 16 ligas y 9 copas, muy por encima del Olimpija, el equipo de la capital. Aunque esta temporada no está siendo la mejor, ocupando la media tabla y ya lejos de poder revalidad su título, aquí sí podrá volver a sentir lo que es el fútbol de máximo nivel y, ojalá, dejar atrás sus problemas.