Gelabert: “Cuando subí con el Madrid me impactó Isco”
Dos roturas del cruzado frenaron a una de la perlas de La Fábrica. Tras rehacerse en el Mirandés, emprende un nuevo reto en la Ligue 1 con el Toulouse francés...
Hay jugadores que parecen predestinados, casi desde la cuna, a ser estrellas. Es el caso de César Gelabert (22 años), nacido en Palencia y criado en Alicante, hijo de futbolista profesional y nacido con un don muy especial para jugar al fútbol. Niño prodigio desde que empezó a despuntar en el Hércules, llegó al Real Madrid con 14 años, fue internacional en casi todas las categorías inferiores de la Selección y en La Fábrica llevaba puesto el sello de “jugador potencial del primer equipo” casi desde su llegada. Mediapunta de gran talento, las lesiones lo llevaron al Mirandés, donde ha dejado un buen recuerdo. Acaba de fichar por el Toulouse francés, con el que jugará la Europa League, gracias a una exhaustiva selección a través del Big Data y un seguimiento de muchos años.
—Ha vivido un calvario de lesiones. ¿Cómo se encuentra físicamente?
—Vengo de una rotura de cruzado, que supone una recuperación muy larga y pesada, pero desde que reaparecí con el Mirandés he ido a más y me veo mucho mejor. Aún no he llegado al 100%, pero estoy haciendo un trabajo que me está ayudando a recuperar del todo las buenas sensaciones para empezar la pretemporada de la mejor manera posible.
—¿A nivel anímico también cuesta recuperarse cuando se sufren tantos percances?
—Cuesta pero hay que hacerlo. Yo tuve la suerte de poder marcar gol ante el Tenerife nada más volver y eso me dio un plus de confianza. Además, he trabajado bien los isquios y cuádriceps y me veo mejor. Siempre he sido un jugador fino pero me encuentro fuerte y eso ayuda.
—¿Cómo se produce su curioso fichaje por el Toulouse?
—Ellos contactaron conmigo y me hicieron una propuesta muy importante. Me contaron la historia del club y cómo funciona el Big Data. Me lo pusieron en hoja y papel, demostraron mucha confianza en mí y por eso no lo dudé.
“Quiero demostrar que el Toulouse no se ha equivocado apostando por mí”
—Seguramente le mostrarían datos suyos que ni usted mismo conocía.
—Así fue, exactamente. Me seguían desde mi época en el Real Madrid y tenían muchísima información sobre mí. Yo no tenia ni idea de muchas cosas. Conocían perfectamente mis dos lesiones de ligamento cruzado y cómo habían sido las recuperaciones. Realmente me encantó que tuvieran tanta esperanza en mí y tengo la intención de demostrar que no se han equivocado.
—¿Qué tal su nivel de francés?
—Flojo de momento. Estoy buscando profesor para llegar allí y poder entenderme un poco mejor con la gente
—Pasa de Segunda División en España al campeón de la Copa de Francia y a jugar la Europa League. Es un salto importante…
—Lo es, pero siempre hay que tener los pies en el suelo. Tengo muchísimas ganas. Voy a trabajar más que nunca, a aprender francés y a llegar con mucha alegría a los entrenamientos cada día.
—La Ligue 1 es una liga muy física y usted es muy técnico. ¿Adaptación complicada?
—Espero que no. Yo soy técnico y de complexión fina, pero tengo fuerza en desplazamientos y para la conducción. El físico puede engañar. Mi fútbol se juega por abajo y, sobre todo, quiero hacer una pretemporada completa, que hace tiempo que no puedo, con mis nuevos compañeros para ponerme a tono desde el principio.
—¿Las lesiones le han hecho más fuerte psicológicamente?
—Me han hecho madurar. Se pasa muy mal. Estás de bajón al principio y pasas mucho tiempo solo, pero el proceso te lleva a ser más fuerte tanto física como anímicamente.
“Las lesiones me impidieron poder triunfar en el Madrid"
—Usted estaba considerado una joya en Valdebebas y su progresión era de primer equipo. ¿Qué le faltó para poder cumplir ese vaticinio?
—Me citaron una pretemporada con el primer equipo pero me rompí el cruzado justo antes, en junio de 2018, jugando la final de Copa de Juveniles contra el Atlético. Fue mala suerte. Era muy joven, me llegó ese duro golpe de forma inesperada y entré en shock. Al año siguiente me perdí el Europeo Sub-19 con la selección por una fractura de clavícula en un entrenamiento. Las cosas se torcieron en el Madrid, no pude triunfar y tuve que llevar mi vida futbolística por otro camino.
—Echando la vista atrás ¿se arrepiente de algo o piensa que podía haber hecho algunas cosas de forma diferente?
—Sobre todo la forma de afrontar mi primera lesión. No lo supe encajar bien y no fui lo suficientemente maduro para llevarlo como debía.
“Mi primera rotura de cruzado no supe llevarla bien. Me faltó madurez”
—¿A qué se refiere?
—A factores como la alimentación, el descanso o la forma de cuidarme. Intenté llevarlo como algo personal y en solitario y me equivoqué. En esta segunda lesión había aprendido la lección, pedí ayuda a quien sabía que me la podía dar y ha ido mucho mejor.
—¿Con qué compañeros del Madrid y de la selección coincidió en su buena época?
—Con Antonio Blanco, Sergio Arribas, Ferran Torres, Abel Ruiz, Juan Miranda, Sergio Gómez…Todos muy top y me alegro de que les vaya bien.
—Su padre, Juan Miguel, fue futbolista profesional en equipos como Elche, Sporting, Hércules, Sevilla… Aunque él era defensa, ¿cuál ha sido su mejor consejo?
—Que no me rinda nunca. No bajar los brazos ante la adversidad. Eso es lo que más intento tener presente.
—En la etapa que estuvo entrenando con el primer equipo del Madrid, ¿qué jugador le impresionó más?
—Me impactó Isco. Lo que hacía con el balón era increíble. Prácticamente era imposible quitárselo. Me pareció brutal como futbolista. Luego, Benzema, Modric… Pero Isco me pareció impresionante.
“Cuando entrenaba con el primer equipo soñaba con ser uno de ellos”
—¿Soñaba entonces que podía ser uno más de ellos?
—Claro. Obviamente. Cuando entrenas con ellos tu ambición y tu ilusión es la de ser uno más y compartir momentos con ellos. No ha podido ser por culpa de las lesiones y hay que tirar hacia delante por otro camino.
“Isco me impactó. Se convirtió en mi referente”
—¿Ha tenido algún referente en el fútbol?
—Mi ídolo de la infancia siempre fue Marco Reus, del Borussia Dortmund. Era en el que más me fijaba hasta que conocí a Isco. Desde ese momento él pasó a ser mi referencia y ahora me quedo con él. Lo veía entrenando y se me caía la baba con las cosas que hacía.
—Usted llega ahora a la Ligue 1. ¿Sería una buena noticia que, ya sin Messi, Mbappé se fuera del PSG al Madrid para que el resto de equipos tengan más opciones de ganar?
—Incluso sin ellos el PSG sería un equipazo. Para la liga francesa es mejor que se quede y para mí también porque es un sueño poder jugar contra él.
—¿Qué desafío se marca para esta primera temporada?
—Lo primero adaptarme pronto al país, a la ciudad, a los compañeros y a los técnicos. Quiero dar lo mejor de mi fútbol en Toulouse lo antes posible.