García Pimienta: “Lo hemos intentado de todas las maneras”
El técnico amarillo opina que a su equipo le faltó más velocidad en la circulación del balón. “Necesitábamos desordenarlos” por eso incidió atacar por el exterior.
García Pimienta comparecía ante los medios tras el empate en el Sardinero ante un rival que se vio con uno menos a partir del minuto 40. “Ha habido dos partidos”, dijo el técnico amarillo en referencia al desarrollo del encuentro tras la expulsión de Pombo. A su juicio, “el Racing ha salido muy bien, ha generado situaciones de peligro sobre todo a balón parado”.
Para García Pimienta su equipo tardó en arrancar. “No ha costado entrar en el partido, a partir del minuto 20, sin ocasiones de gol pero con llegadas, hemos neutralizado ese primer arreón del Racing y naturalmente y la jugada de expulsión de Pombo cambia todo”. A partir de ahí los rivales se armaron en defensa y ese fue el segundo encuentro que se vivió.
En la segunda parte opinó que “lo hemos intentado de todas las maneras, gracias al orden que han tenido ellos, han sido muy pacientes, disciplinados y han corrido como nunca, han aguantado sin que le generáramos ocasiones de gol”, afirmaba el entrenador de la U.D. Las Palmas.
Entre las causas para que Las Palmas no fuera capaz de romper la defensa racinguistas, cree que se puede deber a que “nos ha faltado velocidad en el juego, les insistía de ir por fuera porque por dentro acumulaban mucha gente y era muy difícil”. Y es que, “la clave era ir por fuera para ver si con algún centro éramos capaces de cogerlos desorganizados”.
También dentro de la coctelera de razones opinó que estaba que “las ganas de ganar ha hecho que nos precipitáramos un poco, pero seguimos sumando”, y es que su equipo sigue imbatido desde el mes de marzo.
Y como moraleja del partido reconoció que “me quedo con que teníamos que haber acosado un poco más al Racing en la segunda parte. Teníamos que haber sido más insistentes, después entrará la pelota o no”. Además que, “ha habido muchos momentos de entrar por fuera y llevar de nuevo al otro lado y a veces, con el orden que ellos tenían con sus nueve jugadores de campo, necesitábamos desordenarlos. Y con la circulación no rápida hacía que ellos estuvieran ordenados”.
Sobre la suplencia de Moleiro, primera del año, tiene una explicación estratégica. Confesó que se quería ser “progresivo” con la vuelta de Viera tras la lesión y “que hiciera 60-65 minutos y acabar con Moleiro”. Sin embargo la expulsión de Pombo exigió menos físicamente al capitán y de ahí que aguantara todo el encuentro.