Al Nassr 2 - Al Ettifaq 3
Medrán gana la partida a Cristiano
Al Nassr se despide, salvo milagro, del campeonato y se complica el acceso vía Liga a la próxima edición de la Champions asiática. Enfado monumental de Cristiano. Jhon Durán, expulsado. Doblete de Wijnaldum.
De la victoria por obligación a un sorpresón de derrota. Al Nassr y Cristiano Ronaldo dicen adiós, salvo milagro, del título liguero y se complican su presencia en la próxima edición de la Champions asiática salvo que alcen el título de la presente edición. La victoria de Al Qadsiah minutos antes del pitido inicial en Riad añadía presión a los de Riad, pero el que acabó saltando por los aires fue el portugués. Tras un inicio voluntarioso, en el que se puso a los mandos de la ofensiva de Al Nassr, el de Madeira acabó de nuevo siendo diana de todos los focos, pero no precisamente por sus goles, que siguen estancados en los 925 con ese objetivo vital de final de carrera de llegar a los 1.000, si no por descargar su ira ante el colectivo arbitral en los minutos finales de un encuentro ya con el copyright de los de Stefano Pioli, abonado al delirio.
La semilla de la cólera del portugués la sembró Rodak en un primer acto con protagonismo de los porteros y en el que Al Ettifaq se mostró colectiva y netamente superior a un Al Nassr entregado a su capitán. Hasta en cuatro ocasiones se topó Cristiano con los casi dos metros de estatura del portero checo, el primero de los tormentos que asolarían al ‘7′. En la quinta, reventó el palo casi sin ángulo. En el bando contrario, Bento daba la réplica multiplicando sus brazos ante los Toko Ekambi, viejo conocido de la afición española tras su paso por el Villarreal, o Wijnaldum, dirigidos sensacionalmente por el exmadridista Álvaro Medrán. A la vuelta de vestuarios se destaponó la cascada de acontecimientos.
Yahya, que ya fue capital en la victoria de la pasada semana ante Al Ahli, hizo el 1-0 en el 47′ con un cabezazo-carambola. Diez minutos después, el VAR concedió un tanto de Wijnaldum habilitado milimétricamente por Fatil, que acabó saliendo llorando del campo. Él se encargó de cabecear a placer en el punto de penalti a la salida de un córner para subir el 2-1 al marcador en el 65′ pero a falta de diez minutos para el final, batió sin querer a Bento al intentar despejar un centro-chut de Bamasaud.

Entre medias, la rodilla de Cristiano hizo saltar todas las alarmas al chocar con Rodak. También tuvo la oportunidad de hacer la sentencia el portugués, alimentando ese mantra futbolístico del ‘quien perdona lo paga’. La factura llegaría apenas tres minutos después, en el 88′, cuando Wijnaldum completó su doblete con una rosca magistral tras dejada de tacón de lujo de Toko Ekambi. Además, con recargo.
El partido gris de Jhon Durán, tras dos exhibiciones iniciales, acabó en tarjeta roja en su tercer partido con Al Nassr al propinar un golpe en el cuello a un rival que desató los demonios del portugués con otro enfado monumental, directo a su galería de los horrores. Pateó con fuerza el balón que estaba ya plantado en el centro del campo en dirección a los banquillos y se dirigió al cuarto árbitro, visiblemente fuera de sí y jurando en arameo, solicitando explicaciones y mostrando su disconformidad con una decisión que deja a los de Stefano Pioli en cuarta posición, a tres puntos del ‘spanish Al Qadsiah’ de Nacho, Míchel o Aubameyang, y a ocho puntos del Al Ittihad de Karim Benzema, que mañana se juega cuarto y mitad del título ante Al Hilal.