Oltra: “En España no hubiese competido en Europa ni en mis mejores sueños”
AS charla con José Luis Oltra (Valencia, 1969) que dirige fuera de España por primera vez en su carrera. Concretamente, el AEK Larnaca chipriota, líder de su liga.
José Luis Oltra (Valencia, 1969) atiende a AS desde Chipre viendo, como no podía ser de otra manera en él, fútbol. “Siempre estoy pensando en el balón, ya sabes”, reconoce el técnico. El partido, desde luego, no merecía menos pensaba Oltra. Un Pafos-AEL Limassol. Dos equipos con muchas opciones de jugar el playoff por un campeonato chipriota en el que el AEK Larnaca es líder.
¿Cómo le está yendo en su aventura chipriota?
De momento, mi primera experiencia en el extranjero está siendo más que positiva. Vamos primeros en liga y, por primera vez en la historia del AEK Larnaca, vamos a disputar la primera eliminatoria de competición europea. A nivel personal, va todo bien también. Es cierto que estoy más sólo que ‘kung fu’ porque no me he venido con la familia y eso siempre cuesta, pero como los resultados acompañan todo se está viendo mucho mejor.
Sin embargo, el AEK está muy ‘españolizado’.
Claro. En la ciudad deportiva se escucha mucho castellano porque desde el director deportivo, Xavi Roca, al segundo entrenador de porteros todos somos españoles. Además, en la plantilla hay muchos jugadores de España, Latinoamérica o Portugal, que nos entienden sin problema.
¿Y con el inglés, cómo le va?
Yo, cuando llegué, no hablaba nada. De hecho, cuando Xavi Roca se reúne conmigo por primera vez, le fui claro: “No hablo nada de inglés”. No es que tuviera un nivel intermedio como se dice para quedar bien. Directamente, no hablaba nada. Sin embargo, ahora puedo decir que entiendo y me entienden. Las ruedas de prensa, los entrenamientos y el día a día ya lo hago en inglés y sin mayores problemas.
¿Ha acertado marchándose de España después de casi 20 años entrenando aquí?
Sin duda. De no haberme atrevido a dar este paso no hubiera vivido algunos momentos que he vivido o estoy viviendo. Por ejemplo, nos quedamos a las puertas de disputar Champions League cayendo en penaltis ante el Midtjylland, hemos ido a competir a estadios como el del Fenerbahçe, Stade de Rennais o Dinamo de Kiev en Europa League o el maravilloso momento que estamos viviendo en la competición doméstica. En España no hubiese competido en Europa ni en mis mejores sueños”.
¿Cómo se fraguó su fichaje?
Fue todo muy rápido. A principios de junio, me llama Xavi Roca, previo contacto con mi agencia de representación. Me gusta mucho lo que me cuenta del proyecto y la confianza que deposita en mí. Tras esta primera reunión, hablo con Andoni (Iraola) e Imanol (Idiákez),que ya habían entrenando a este equipo, y sólo reafirman lo que ya me había contado Xavi. “No lo dudes”, llegaron a decir. Claro, yo tenía sólo una semana-diez días para pensarlo porque en junio empezábamos las rondas clasificatorias de Champions.
Y su familia, ¿qué opinó?
Hablé con mi mujer y me animó a probar suerte. Sin embargo, da la casualidad que mi hijo mayor estaba haciendo el examen de acceso a la universidad por lo que no quise decirle nada para que no se descentrase hasta que acabase. Una semana tuve que guardar el secreto. Por eso, cuando se enteran mis hijos fue casi de ‘sopetón’ y conmigo poniendo rumbo a Chipre como aquel que dice.
¿Cómo es la liga chipriota?
La liga chipriota es una competición mejor de lo que la gente se piensa. De hecho, a mí me ha sorprendido gratamente. El ambiente es muy bueno, el terreno de juego siempre es de césped natural y, por lo general, el nivel de los jugadores es alto. Cada vez hay más propietarios extranjeros con las posibilidades de pagar grandes sueldos lo que atrae a jugadores de mayor nivel. Es cierto que hay diferencias entre la parta baja y la alta. Si comparemos con la liga española, un equipo puntero en Chipre estaría en la pelea por la salvación en Primera y luchando por ascender en Segunda.
¿Alguna diferencia a la que le costara adaptarse?
Lo de las sanciones y la presencia de un árbitro extranjero en el partido importante de cada jornada es, sin duda, lo que más me ha llamado la atención. Se cumple ciclo cada tres amarilla pero si llegas a ocho amonestaciones, cumples cada dos y si llegas a diez, cumples con cada amarilla. Sin embargo, eso no es lo más curioso. El entrenador es el que puede decidir si quiere que cumpla en el partido siguiente o dentro de dos. Esto te da un componente estratégico que en España no existe. Con respecto a lo del árbitro, normalmente viene uno portugués o italiano a pitar el duelo más importante de la jornada. Españoles creo que sólo ha venido Munuera para pitar el Omonia-Apoel.
¿Y su AEK Larnaca?
Nosotros hemos hecho historia en dos cosas. Hemos encadenado la racha más larga de victorias del equipo con 9. Y, además, vamos a disputar la primera eliminatoria europea del club y la segunda de un equipo chipriota (el Apoel ya jugó contra el Madrid en Champions en 2017). La ciudad está volcada y tenemos muchas ganas de este partido.
Eliminatoria en Conference League y contra un equipo ucraniano.
Es la Conference League, sí, pero es un hito histórico para la ciudad. Y sí, nos estamos acostumbrando a jugar contra equipos ucranianos. El Dinamo de Kiev y, por dos veces, el Dnipro-1. Ya les eliminamos en la ronda de clasificación para Europa League. Contra el Dinamo jugamos en Cracovia (Polonia) y contra el Dnipro-1 jugamos en Kosice (Eslovaquia). Al final, cuando a los futbolistas saltan al césped desconectan de todo. El problema para ellos, la ‘ventaja’ para nosotros es que, por desgracia, ellos no cuentan con el factor campo en las eliminatorias.
Ustedes han fichado a un jugador ucraniano, Artem Gromov, en este mercado invernal.
Sí, y da la casualidad que viene del Dnipro-1. Al final, ellos están viviendo situaciones tan duras como atípicas. Por ejemplo, me contó que alguna vez han tenido que parar un entrenamiento por la amenaza de un bombardeo aéreo. Mirceas Lucescu (entrenador del Dinamo de Kiev) me reconoció que es una situación muy dura.