El Nápoles elimina a Modric

El King Saud University Stadium de Riad entonó cánticos italianos al acoger este jueves la primera semifinal de la Supercopa de Italia en formato Final Four. El primer partido fue Nápoles-Milan y la primera mitad fue digna de un partido a vida o muerte. Los dos equipos... Una primera mitad digna de un duelo a vida o muerte. El Nápoles y el Milan no se guardaron nada, y los rossoneri abrieron el desafío en el 5′ con una chilena de Pavlovic que liberó a Loftus-Cheek frente a la portería y obligó a Milinkovic-Savic a realizar de las pocas atajadas de la noche. El Nápoles pronto tomó el control, mientras que Allegri ordenó a De Winter que marcara de cerca a Hojlund. Los azzurri hicieron lo mismo con Pulisic, pero en el 16′ el Milan tuvo una oportunidad por medio de Saelemaekers, que no logró aprovechar un cabezazo mal colocado de Rrahmani.

Elmas y Hojlund se pusieron en marcha en la mitad de los primeros 45′ con una parada de Maignan al danés. Específicamente en el 32′ el delantero del Nápoles realizó una jugada maravillosa, marcando un pase filtrado y luego encontrando a McTominay, cuyo disparo con la derecha se fue desviado por poco. La acción se volvió más interesante con el paso de los minutos, y ambos equipos merecieron aprovechar sus ocasiones. El Milan tuvo una apetecible en el 35′ por medio de Pulisic, quien conectó con Saelemaekers desde la frontal del área.

Sin embargo, el centro que le llegó a Rabiot en el segundo palo fue mal controlado por el francés. Nkunku, a su vez, hizo un gran contraataque, pero en el 39′ el Nápoles puso el 1-0. Hojlund volvió a defender el balón, desprendiéndose de De Winter y centrando raso, y encontrando así a Neres con la portería vacía: gol. El delantero del Nápoles cerró la primera parte ganando contundentemente su duelo con el defensa del Milan, cuando Maignan se lanzó al primer palo para despejar el balón a córner.

Al comienzo de la segunda parte, la afición local comenzó a aplaudir tras ver a Modric calentar. Sin embargo, las figuras clave sobre el terreno de juego eran los napolitanos. De hecho, en el 54′ Maignan desvió a córner un potente disparo de Rrahmani desde fuera del área, y tras algunos altercados por faltas de los jugadores del Milan, primero sobre Politano y luego sobre Juan Jesús, el Nápoles puso el 2-0 por medio de Hojlund. En el 64′, el delantero centro recibió el balón de Spinazzola y volvió a ganar el duelo con De Winter, quien se perdió al jugador y Maignan no pudo llegar a tiempo.

A pesar de su ventaja de dos goles, el Nápoles no se rindió, y antes de salir del campo Hojlund demostró ser el jugador del partido otra vez: el danés corrió hacia Tomori, estiró el balón y disparó con la zurda, aunque no fue preciso. Mientras tanto, el rugido de la afición dio la bienvenida a Modric al campo en el 75′. Pero bien pronto los cruces en el campo se hicieron más evidentes y los ánimos se calentaron, aunque el Nápoles mantuvo la calma en su juego y el Milan no logró inquietar realmente a Milinkovic-Savic. Entonces, en el 87′ McTominay lo intentó él, pero su disparo potente se fue demasiado alto. Los siete minutos de descuento fueron largos y consistieron principalmente en idas y vueltas de un lado a otro del campo, hasta que los de Conte se llevaron la victoria y se clasificaron para la final en la que esperan al ganador del Bolonia - Inter.

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