El gol de los 1.000 minutos
Rasmus Hojlund, fichado en verano por 75 millones de euros, marcó el gol de la victoria ante el Aston Villa. El danés, que aún no había visto portería en Premier League, no pudo evitar emocionarse en la celebración.
Había mucha rabia contenida en esa celebración, y eso que Rasmus Hojlund ya sabía lo que era marcar y festejar goles con la elástica del Manchester United. Incluso en Old Trafford. Pero el anotado en el Boxing Day, ante el Aston Villa y a falta de ocho minutos para el final, fue diferente. “Ahora mismo soy el hombre más feliz del mundo”, fue lo primero que dijo el joven ariete danés en el micrófono de Amazon tras concluir el encuentro. Su gol, el primero en Premier League con los red devils, confirmaba una remontada épica.
“Marqué un par (en Old Trafford) en la Champions League, pero hacía tiempo que no lo hacía en la Premier League. Estoy contento de conseguir el primero, y ahora espero seguir construyendo sobre eso. Hoy hemos demostrado mucho carácter”, comentaba Rasmus Hojlund en la entrevista post partido a pie de campo. Sí, el danés, fichado el pasado verano por 75 millones de euros, terminó la fase de grupos de la Champions League como máximo goleador, con cinco tantos en seis jornadas, pero en la competición doméstica ha tardado 14 jornadas en ver portería. Los aficionados red devils han esperado un total de 1.026 minutos para ver el primer gol de Rasmus Hojlund en Premier League, aunque algunos pensarán esta demora ha merecido la pena.
El 3-2 ante los villans desató la locura en Old Trafford, y en la propia plantilla del Manchester United. El delantero de 20 años corría y gritaba como si le fuera la vida en ello. Sus compañeros, incluido en André Onana, salieron disparados a abrazar al héroe de la noche y Rasmus Hojlund no pudo evitar emocionarse en plena celebración del gol de la victoria.
Con el pitido final, y tras recibir el abrazo de Alejandro Garnacho en el banquillo y el de Erik ten Hag sobre el césped, el danés afirmó: “Old Trafford ardía. Es un momento emocionante para mí marcar el gol de la victoria. Puedes ver mi alivio en mi celebración. Fue un gran momento. Conseguimos tres puntos contra un buen rival en Old Trafford tras una remontada y mi primer gol. No se puede pedir más”.
El encuentro ante el Aston Villa, que encadenaba 11 partidos sin conocer la derrota entre todas las competiciones, podía ser la puntilla para Erik ten Hag. Más si cabe cuando los villans se marcharon ganando 0-2 al descanso. Por suerte para el técnico neerlandés, un argentino de 19 años y un danés de 20 salieron al rescate del equipo y su entrenador. “Tiene un carácter fuerte. Es muy resistente, muy decidido, tiene una gran personalidad, y eso es lo que necesita un goleador”, afirmó el propio Erik ten Hag sobre Rasmus Hojlund tras el partido.
La parroquia mancuniana espera y desea que este sea el primero de muchos tantos en Premier League. Su precio y juventud han sido una losa bastante pesada en los inicios del exdelantero de la Atalanta en Old Trafford, pero lo más complicado ya está hecho. Como añadía Bruno Fernandes en zona mixta, Rasmus Hojlund “sabe que tendrá presión, juega en uno de los clubes más grandes del planeta. Tiene ganas de marcar, queremos que tenga confianza, y sabe que hay presión y atención. Le necesitamos de verdad”.
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