Sané, un problema para el Bayern

El Bayern Múnich tiene muchas dudas en las negociaciones de renovación con Leroy Sané debido a su elevado salario, que alcanza los 20 millones de euros brutes por temporada. Según informaciones recientes, el club bávaro busca reducir su masa salarial en el escalón salarial más alto, lo cual afecta sobre todo a sus extremos: Sané, Kingsley Coman y Serge Gnabry. La directiva ha adoptado una política de sueldos de élite solo para aquellos jugadores que ofrezcan un rendimiento constante y sean titulares indiscutibles, algo que ahora pone en duda la continuidad de Sané en el equipo.

Pese a la cautela del club, los dirigentes han reconocido que Sané ha mostrado un notable compromiso con el Bayern. Durante la pasada temporada, el delantero alemán jugó con problemas recurrentes en la ingle, incluso recurriendo a inyecciones en partidos clave, un esfuerzo que afectó su desempeño en la Eurocopa y derivó en una cirugía posterior. Esta entrega ha fortalecido su identificación con el equipo, algo que los directivos valoran, aunque sigue sin ser suficiente para asegurarle una renovación con las mismas condiciones.

Sané, por su parte, está dispuesto a permanecer en el Bayern, pero busca claridad sobre su futuro antes de quedar libre el próximo verano. Ante la posible falta de acuerdo, clubes como el Arsenal y el Manchester United han mostrado interés en el extremo, posicionándose como opciones para el internacional alemán en caso de que el Bayern no concrete su renovación.

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