El amargo retiro de Cesc
El futbolista español fichó por el Como de la Serie B italiana para disputar sus últimos partidos y entrar como accionista. El equipo está en descenso a Serie C con seis puntos de 27 y llega de encajar una manita ante el Modena.
Cesc Fàbregas buscaba un destino idílico en el que recuperar la ilusión antes de colgar las botas. El centrocampista venía de vivir “el peor año de su vida” en el Mónaco y eligió el Lago de Como para apurar sus minutos como profesional. En Italia encontraba un buen lugar para vivir junto a un club con el que pelear por subir a la Serie A y al mismo paso en el que entraba como accionista con vistas al futuro. Una acción en la que le quiso acompañar Henry, quien fuera su compañero en el Arsenal. Sin embargo, la idea del ascenso con la que llegaba parece difícil tras nueve jornadas de competición. El equipo biancoblù atraviesa una profunda crisis deportiva tras perder en el último partido ante el Modena por 5-1 y estar clasificados en la 19ª plaza ocupando puestos de descenso a Serie C, tercera división italiana.
Los larianos ha sumado seis puntos de 27 posibles. Su única victoria llegó en la jornada 8 ante el Perugia por 1-0, mientras que los otros tres puntos reflejados en su casillero son fruto de los empates ante Spal, Pisa y Cagliari. Cosenza, Sudtirol, Frosinone y Brescia se llevaron la victoria frente al equipo que capitanea Fàbregas.
Los problemas en las dos áreas señalan el mal momento del club que entrena Giacomo Gattuso, primo del entrenador del Valencia. El Como es el equipo más goleado de la categoría con 19 tantos, a dos por partido, y es el quinto que menos marca de la Segunda italiana con nueve goles, misma cifra que Palermo Cosenza y Cagliari. Su máximo goleador es Patrick Cutrone, nacido en Como y exjugador de Milan y Valencia, con tres dianas, le sigue el español Alex Blanco con dos, y cierran la tabla de goleadores Mancuso, Arrigoni, Ioannou, Vignali, Kerrigan con uno.
Cesc, con contrato hasta 2024, apostó por el proyecto deportivo de Robert Budi y Michael Bambang Hartono, dos millonarios indonesios, con ganas de que el club crezca con una nueva Ciudad Deportiva y un estadio. Tras dos meses de competición su valor por 90 minutos en Olocip es el más bajo desde 2016, año en el que la empresa de IA registra datos. Así, el panorama deportivo para el que un día fuera campeón del Mundo con España parece complicado.