De Bruyne ya manda en el Nápoles
El equipo de Conte se estrena en la Serie A en casa del Sassuolo con victoria por 2-0 y gol del exugador del City.
La Serie A 2025-26 ha arrancado en el Mapei Stadium de Reggio Emilia, en el que el vigente campéon de Italia ha desafiado al Sassuolo de Grosso bajo los ojos del seleccionador Rino Gattuso, que observó el partido desde la grada.
Las primeras jugadas ya emocionaban, porque venían de Kevin De Bruyne, que fue titular y de quien Lele Oriali, leyenda del fútbol italiano y coordinador del staff técnico de Napoli, a través de ‘DAZN’, habló así en la previa: “Siempre lo he considerado uno de los más fuertes del mundo, pero de cerca incluso cómo entrena es un espectáculo. Tiene ideas y una visión de juego que va más allá. A veces ni nosotros lo alcanzamos a comprender”.
Sin embargo, fueron las viejas certezas las que decidieron el ritmo del Nápoles en la primera mitad del encuentro. Así, en el 4-1-4-1 con Lobotka, Politano, Anguissa y McTominay más allá del belga, fue el escocés el que marcó el primer gol del campeonato y de los azzurri al 17′.
Hermosa acción del Nápoles con Anguissa, que desde la mitad del campo servía por la banda a Politano, que se movía hacia el centro y asistió en el área para McTominay. El futbolista venció con un cabezazo a Turati y festejó donde los tifosi azzurri.
El Sassuolo tuvo que esperar al 43 ‘ para acercarse a la portería, cuando Doig corrió por todo el campo y lanzó un disparó en diagonal, que Meret atajó. Al final de la primera mitad, McTominay intentó nuevamente un disparo con la derecha desde el borde del área, pero golpeó el travesaño.
La segunda mitad, por el contrario, tuvo un claro dueño: Kevin de Bruyne. En el 50′ lo intentó con un tiro libre, pero fue desviado por su compañero Lucca. Siete minutos después llegó el gol el día de su debut. Un debut de ensueño. Otro tiro libre, que esta vez no fue desviado en el área y acabó al fondo de la red.
También tuvo dos ocasiones Lucca, que trató de que no se echara de menos a Lukaku, aunque no logró transformar su insitencia en gol. En el 79′, el Sassuolo se quedó con 10 hombres por una falta de Koné sobre Lucca, que provocó una tarjeta roja directa. Así, el Nápoles pasó al 4-3-3 en los 10 minutos finales con Neres, Noa Lang y Gilmour en el mediocampo.
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Con la salida de Lucca del campo, el delantero centro fue De Bruyne. La última jugada peligrosa del partido llegó de Anguissa, de los mejores en los 90′, que lo intentó desde el borde del área, pero el balón se fue alto. Igual de alto que queda el Nápoles en la clasificación, que arranca la temporada con el pie justo. Como justamente el de Kevin De Bruyne.
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