¿Cómo les fue en el Manchester United a los fichajes más caros que Mbeumo?
El delantero francocamerunés tendrá que romper una larga tradición de decepciones entre los fichajes récord del equipo inglés.
El Manchester United se ha ganado a pulso el puesto de gastador compulsivo. Los mancunianos tiene el mayor gasto neto en todo el mundo en los últimos diez años, pero esa inversión no les ha alcanzado para volver a levantar una Premier o una Champions League en ese periodo de tiempo. Además, en esos diez años han realizado 18 de los 20 fichajes más caros de su historia -y en el último quinquenio, 6 de los 10-, pero se cuentan con los dedos de una mano los nombres de esa lista que dejaron buen recuerdo en Old Trafford.
Ese despilfarro se ha llevado por el camino a decenas de futbolistas, que llegaron generando ilusión y se marcharon por la puerta de atrás. Bryan Mbeumo (75 millones de euros) es la última gran apuesta del Manchester United. El francocamerunés llega al noroeste inglés después de marcar 20 goles la temporada pasada con el Brentford y ser el quinto máximo goleador en el acumulado entre las tres últimas ediciones de la Premier League, solo por detrás de Erling Haaland, Mohamed Salah, Alexander Isak y Ollie Watkins. Son muchos los motivos que llevan a pensar que el del delantero será un fichaje exitosos, pero en su contra tiene un historial que invita a la precaución.
Paul Pogba (105 millones)
El francés se marchó de la academia de los red devils para probar suerte en la Juventus y en Italia se convirtió en uno de los mejores mediocampistas del planeta. Su rendimiento le valió el regreso a Manchester en el que era el traspaso más caro de la historia hasta ese momento -aunque luego la inflación del mercado lo ha terminado sacando del top 10-.
El club apostó por él como su nuevo líder, el que encabezaría los éxitos tras el naufragio de la era post Ferguson, pero de lo soñado poco se hizo realidad. Pogba no estuvo a la altura de las expectativas -ni del precio pagado- y no le alcanzó para conseguir que el United volviera a la cima de Inglaterra. Aun así, el tiempo y los fracasos de incorporaciones posteriores lo han reivindicado: estuvo seis años en el club -es el equipo con el que más partidos ha disputado- y, aunque no alzó ninguno de los grandes títulos, sumó una Europa League.
Antony (95 millones)
Aunque en la lista hay varios casos decepcionantes, quizás ninguno esté a la altura del extremo brasileño. Apadrinado por Erik ten Hag, aterrizó en Manchester en verano de 2022 para ser la nueva estrella del entrenador neerlandés, la eminencia de los banquillos europeos, de cara a una nueva era que se prometía larga y exitosa; al final, ni lo uno ni lo otro. Al futbolista le fue tan mal como al director técnico y en tiempo récord pasó de crack a meme.
Con la relación rota entre club y jugador, Antony terminó refugiándose en Sevilla y consiguió en el Real Betis su lugar en el mundo. Media temporada con los verdiblancos le bastó para volver a nacer, volver a sentirse como aquel que emocionaba al espectador en el Ajax. Ahora está de regreso en Old Trafford, pero ninguna de las dos partes está dispuesta a volverlo a intentar; la dirección deportiva le busca salida y él espera poder regresar al Benito Villamarín.
Harry Maguire (87 millones)
El único defensor entre los siete más caros. El inglés brilló con el Leicester City y el Manchester United, necesitado de zagueros, otra vez gastó a lo grande. Su primeros pasos con los mancunianos se prestaban para el optimismo, pero sus fallos, los malos resultados y la pérdida de confianza fueron un lastre enorme. El ex del Hull City perdió la titularidad y su valor de mercado se fue reduciendo progresivamente hasta llegar a los 13 millones de euros en la actualidad.
No obstante, cabe decir que, desde la contratación de Rúben Amorim, pese al mal rendimiento colectivo, sus prestaciones han mejorado. De hecho, el futbolista de 32 años recuperó su puesto en el once titular como uno de los centrales en la línea de tres; esto a esperas de ver si el club decide incorporar algún defensor más en las semanas restantes de la ventana de traspasos.
Jadon Sancho (85 millones)
Canterano del máximo rival local y para entonces una de las más grandes promesas de Europa, Sancho optó por volver a la ciudad donde pasó su etapa formativa. Su etapa en el United fue turbulenta desde el inicio, pues un mes después de su llegada al club le llegó la oportunidad de reunirse con una de sus máximas leyendas, Cristiano Ronaldo, y el joven londinenses se vio obligado a ocupar roles más incómodos para él.
Después de dos años y medio, la relación se volvió insostenible. En diciembre de 2023, Erik ten Hag le recriminó públicamente a Sancho su poca entrega en los entrenamientos y éste lo enfrentó, también de forma pública; lejos de ceder, el entrenador lo condenó a foguearse con el equipo sub 21 y lo exilió de las instalaciones del primer equipo. Todo ello terminó con un fugaz regreso al Dortmund -donde volvió a brillar y fue uno de los pilares que llevó al equipo a la final de la Champions- y posteriormente con una cesión al Chelsea. Ahora, al igual que Antony, permanece a la espera de conseguir un nuevo hogar.
Romelu Lukaku (85 millones)
Antes de ser el fichaje decepción del Chelsea, Lukaku fue el fichaje decepción del Manchester United. Con la camiseta del Everton, el belga escribió su nombre entre los mejores delantero de la Premier League, pero nunca volvería a tener tal impacto en la liga inglesa después de despedirse de Merseyside. Eso sí, pese a no cumplir las expectativas, la historia de Lukaku con el United no alcanzó los niveles de caos de otros fichajes o de él mismo con los blues.
Lukaku dejó Old Trafford dos años después de su llega a cambio de 74 millones de euros. Se unió al Inter, donde sí fue la estrella que esperaban, y comenzarían sus éxitos en la Serie A. Después fichó por el Chelsea, volvió al Inter tras pelearse con el club de Londres y ahora es protagonista de un Nápoles que acaba de ganar el Scudetto.
Rasmus Hojlund (78 millones)
El joven danés nunca había pasado de los diez goles en una liga de primera división, pero la confianza en su potencial llevó a un Manchester United urgido de goles a hacer una enorme inversión. En su primera temporada, consiguió romper esa barrera y llegó a la decena de goles en la Premier League, pero su sequía en la 24/25 frenó todas las esperanzas que podía tener la afición: apenas 4 tantos en 32 jornadas.
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Aunque no se espera que salga del equipo, Amorim no cuenta con Hojlund como una pieza importante de su equipo. La directiva, que ya ha conseguido a dos refuerzos para el ataque, tiene marcada la incorporación de un 9 titular como su máxima prioridad en el mercado.
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