Bradley, el último ‘regalo’ de Klopp

Conor Bradley (Castlederg, 2003) está empezando a llamar a la puerta de la titularidad. La lesión de Alexander-Arnold (estará varias semanas fuera por un pequeño desgarro en el ligamento lateral de la rodilla) le ha abierto un hueco en el once de Klopp y el chico está aprovechando su momento. Cuatro partidos que dejan claro que hay un gran talento cociéndose en el lateral derecho del Liverpool.

Ante el Norwich, hizo un partidazo. Dio dos asistencias, siendo la primera de ellas a Darwin Núñez una demostración de su capacidad para llegar al área y su buen físico tras robar el balón. Su gran performance se cerró con tres pases clave, un 90,5% de acierto en el pase y seis centros.

Ante el Fulham hace unas semanas, Bradley quedó señalado en el gol de Willian. Dejó recibir cómodo al brasileño y se cayó dentro del área. Sin embargo, Klopp no le dio importancia porque “estas cosas pasan” y recalcó que lo importante era que, a partir de entonces, fue muy sólido defensivamente.

Conor Bradley no ha tenido una campaña fácil. El año pasado hizo un temporadón con el Bolton en League One (7 goles y 6 asistencias), lo que le llevó a ganarse la titularidad en Irlanda del Norte y que el Liverpool quisiese confiar en él para tenerlo en la primera plantilla. Sin embargo, se lesionó de la espalda en la pretemporada y no pudo jugar hasta el 30 de noviembre. Un día más tarde, renovó hasta 2027.

Alexander-Arnold, de comodín

Lo peor que tiene Conor Bradley es que su compañero en el lateral derecho del Liverpool es Alexander-Arnold. El inglés es uno de los mejores jugadores del mundo en su puesto y, a priori, solo su baja puede facilitarle minutos.

Sin embargo, hay otro escenario en el que Bradley puede jugar más y es con Alexander-Arnold en el centro del campo. Es una zona en la que cada vez Klopp le coloca más (de hecho, parece la favorita de Southgate) y los repetidos problemas defensivos de Alexander-Arnold pueden hacer que adelantar su posición sea una opción a tener en cuenta. En este supuesto, Bradley podría jugar más. Una variante que valorará Klopp cuando tenga a ambos sanos. Un regalo que dejará en Anfield antes de irse.