Boehly, propietario del Chelsea: “El nuevo control económico limitará fichajes a cualquier precio”
El nuevo dueño del conjunto londinense advirtió sobre las consecuencias que traería el nuevo Fair Play financiero: “está empezando a tener fuerza”.
El nuevo propietario del Chelsea, Todd Boehly, advirtió que los clubes ya no podrán fichar jugadores a “cualquier precio” debido al endurecimiento de las reglas del nuevo control económico que la UEFA aprobó este año y que entraran en vigor la próxima temporada en un proceso gradual que finalizará en la campaña 2024-2025 con su desarrollo completo. “El ‘fair play’ financiero está empezando a tener fuerza y eso limitará la capacidad de fichar jugadores a cualquier precio”, afirmó Boehly en la conferencia SuperReturn International en Berlín.
El nuevo mandatario del equipo londinense aseguró que la UEFA “se lo toma en serio y seguirá tomándoselo en serio”. “‘Más dientes’ significa sanciones económicas y la descalificación de las competiciones deportivas”, explicó sobre la nueva normativa aprobada por el organismo del fútbol europeo, según la cual los clubes solo podrán destinar el 70% de sus ingresos a salarios.
Así, Boehly está considerando canales alternativos de ingresos para favorecer el renacer del Chelsea, mientras intenta incorporar una mentalidad deportiva estadounidense al fútbol inglés. “Creemos que la huella global de este deporte está realmente subdesarrollada”, señaló. “Hay cuatro mil millones de aficionados del fútbol europeo. Hay 170 millones de fanáticos de la NFL”, comparó.
“Y el fútbol de clubes global es una fracción del dinero de los medios de la NFL. También vamos a pensar en cómo obtenemos más ingresos para los jugadores. Si miras a LeBron James, por ejemplo, tiene todo un negocio y todo un equipo dedicado a lo que no es la cancha. Así que creo que existe la oportunidad de capturar algo de esa mentalidad estadounidense en los deportes ingleses y realmente desarrollarlos”, añadió.
Boehly encabezó el consorcio que compró el Chelsea en mayo después de que el Gobierno británico tuviera garantías de que el ex propietario de los ‘blues’, Roman Abramovich, no se beneficiaría económicamente de la venta, después de ser sancionado por su vínculo con el presidente ruso, Vladimir Putin. Esta compra por parte de Boehly y Clearlake Capital ponía a un período de 19 años con el mandatario ruso al frente del club.