Benzema está de dulce

Al Ittihad, un equipo llamado a pelear por el trono de Arabia Saudí, ya está en lo más alto de la clasificación tras las primeras cinco jornadas de liga. Comparte el primer puesto, eso sí, con Al Hilal, aunque tiene más goles a favor. Alcanzó el escalón más alto de la tabla en una nueva victoria por 4-1 contra Al Khaleej en la que Karim Benzema corroboró su gran momento de forma. El francés volvió a marcar (lleva cuatro jornadas seguidas marcando y, con seis goles, supera los cuatro de Cristiano Ronaldo) y dio una asistencia. El equipo de Yeda bailó al son del exmadridista y la velada acabó en fiesta. Pero tuvo que superar un susto inicial.

Comparecían sobre la hierba del Estadio Rey Abdullah el tercero clasificado y opositor al liderato momentáneo de la liga saudí y un equipo que sólo había ganado un partido con un gol en propia puerta del Damac, su rival en la primera jornada. Todo hacía presagiar un triunfo cómodo del combinado de Yeda, pero los pronósticos saltaron por los aires en apenas cinco minutos. Los que tardó Khaled Narey en batir a Rajkovic para poner el 0-1 en el luminoso. El togolés aprovechó una mala salida del exportero del Mallorca para picársela por encima y mandarla a guardar

Al Khaleej, que tenía en su hoja de ruta guarecerse bien cerca de su portería y salir rápido a la contra para hacer daño a Al Ittihad, veía cómo el partido que había dibujado sobre la pizarra se hacía real sobre el verde. Benzema y compañía, entonces, se abalanzaron sobre la portería defendida por Al Haidari. Precisamente el ex del Real Madrid gozó de tres ocasiones claras en la primera mitad para poner el empate, pero no lo logró. Diaby y Bergwijn, sus escuderos en la proa, tampoco anduvieron acertados y el equipo dirigido por Laurent Blanc marchó a la caseta seco y frustrado.

El plan establecido no funcionaba y, prueba de ello, fue que Blanc decidió cambiar a sus dos laterales en el descanso. Una doble permuta acompañada de un cambio de actitud que surtió efecto y que convirtió a Al Ittihad en un vendaval. Destapó la caja de los truenos, quién si no, Benzema. El exmadridista tiró una pared con Aouar en la frontal del área y batió a Al Haidari con un gran remate raso al segundo palo. Acababa, así, con una resistencia de Al Khaleej que duró 49 minutos. A partir de ahí, un sálvese quien pueda que supuso una travesía hacia la victoria para los locales.

Porque Al Ittihad siguió empujando y Aouar, que le dio la asistencia a Benzema, asumió esta vez el rol protagonista para poner el 2-1 en el luminoso rematando de primeras un servicio lateral. Bergwijn, justo antes de marcharse sustituido, puso tierra de por medio haciendo el 3-1 en la que fue la culminación de una preciosa jugada coral iniciada por Kanté, quien recibió, en forma de ovación, el cariño de su afición. Al Khaleej alzó la bandera blanca, pero Al Ghamdi no entiende de treguas y selló el marcador con un zapatazo tremebundo a la escuadra previo pase de Benzema. El francés y Al Ittihad, así lo refleja la tabla, están de dulce.

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