Así será el nuevo PSG

A falta de un día para que se abra el mercado estival, el PSG ya ha diseñado su política de fichajes con la que intentará, además de acercar a Mbappé a una posible renovación, evitar los últimos descalabros en la Champions League. Luis Campos, que continúa como consejero deportivo una temporada más, ha cerrado los fichajes de Ugarte, Asensio y Skriniar y se encuentra trabajando en otros perfiles que podrían darle un importante salto cualitativo al flamante campeón de la Ligue 1.

Respecto al español, aunque todavía no hay oficialidad, el acuerdo es total y su contrato, hasta 2027, ya está firmado. Este lunes, el mallorquín aterrizó en París, pasó reconocimiento médico satisfactoriamente y estampó su firma para las próximas cuatro temporadas con el PSG. Lo mismo que Ugarte, por el que el club desembolsa 60 millones de euros que, sin embargo, no serán contabilizados para el presente ejercicio, sino para el próximo (se hará oficial en julio), además de fraccionar el pago en cinco partes para reducir los costes de su incorporación.

Skriniar, por su parte, todavía no ha firmado, pero el acuerdo con el eslovaco es total. Aunque había ciertas dudas a orillas del Río Sena respecto a su pubalgia, de la que fue intervenido hace dos meses, el central se ha recuperado y deberá fichar por el PSG a partir del 1 de julio, fecha en la que queda libre después de no renovar con el Inter de Milan. Sin Ramos, que no renovó, su llegada no debería, a priori, desbaratar las negociaciones por Lucas Hernández, que quiere ir a París y el Bayern sigue intentando renovarle.

El banquillo es otro de los temas candentes en las oficinas de Boulogne-Billancourt. Esta semana, Luis Campos le notificó a Christophe Galtier que su despido era inminente, pero la oficialidad depende de que el PSG le encuentre un sustituto en los próximos días. El favorito es Nagelsmann, cuyas negociaciones se encuentran muy avanzadas y por el que Qatar quiere cerrar el acuerdo cuanto antes. El alemán podría llegar con Thierry Henry de segundo, aunque según L’Équipe es casi imposible que la leyenda de la selección le acompañe en su primera etapa en Francia.

El PSG sigue atento al mercado y ni mucho menos ha dado por cerrada la plantilla. Marcus Thuram es el próximo que podría fichar por los parisinos, después de que Luis Campos y Mbappé, que le conoce muy bien de la selección francesa, persuadieran al delantero, libre a partir del 1 de julio, de que la mejor opción para su carrera es que aterrizara en la capital francesa. El club quiere utilizar la misma fórmula que con Asensio: jugador que acaba contrato, capaz de jugar tanto de extremo como de referencia y con una dilatada experiencia en el fútbol europeo.

Después de Thuram, el PSG divisa dos perfiles que, en caso de concretizarse, supondría un golpe absoluto en el mercado. El primero es Victor Osimhen, delantero del Nápoles, aunque el principal obstáculo tiene nombre y apellidos, Aurelio de Laurentiis. El presidente del conjunto italiano reconoció hace varias semanas que no venderán al atacante y su precio podría ascender a más de 100 millones de euros. El segundo es Bernardo Silva que, aunque tiene la intención de salir en verano, un impedimento para su operación es que los Emiratos Árabes Unidos, gran rival geopolítico de Qatar, podría no estar dispuesto a vender a uno de sus mejores jugadores a uno de sus máximos rivales en la esfera internacional.

Finalmente, el PSG deberá abordar la salida de Neymar. Tanto Qatar como el club desean que el brasileño haga las maletas en el próximo mercado, pero según informó L’Équipe, el jugador no está dispuesto a salir a cualquier precio ni a cualquier equipo. Pese a que se informó en primera instancia de que la Premier League estaba atenta a su situación, la realidad es que actualmente no existen negociaciones por su fichaje. Ney, con contrato hasta 2027, podría seguir un año más en París después de haberse operado con éxito de los ligamentos de su tobillo.