Al Khelaïfi lo cambia todo

Joan Laporta es el gran invitado a la cena de gala de la EFC (anterior ECA) y ya llegó al hotel Cavalieri de Roma para reunirse con Al Khelaïfi, en un gesto que aparentemente le distancia del otro club al margen de la asociación, el Real Madrid. Supone esto un varapalo para la Superliga, pues el Barcelona se entregaría nuevamente a Al Khelaïfi y a la UEFA -tienen una joint-venture en común, UC3- y dejaría solo al Madrid en su cruzada contra estos.

La gran novedad de la Asamblea General de la renombrada EFC es la presencia de uno de los dos representantes que aún se mantiene al margen de la organización: el Barcelona. Además, se anunció otra novedad importante: el cambio de nombre y de rediseño. A partir de ahora, la Asociación de Clubes Europeos (ECA) pasa a denominarse EFC (European Football Clubs) en un intento por modernizar y ampliar la asociación que recoge a los conjuntos más importantes del planeta.

También aboga por un cambio en los colores y en su logo, una maniobra con la que mantenerse a la vanguardia de la gestión del fútbol europeo.

“Lo de hoy es mucho más que un cambio de imagen: demuestra que siempre pensamos de forma diferente y traspasamos fronteras para ser aún mejores. Y lo más importante, es una declaración de que el fútbol está en el centro de todo lo que hacemos y que los clubes están en el centro de todo lo que representamos. Nunca dejaremos de trabajar por los intereses colectivos de todos nuestros socios y por el desarrollo del fútbol de clubes en su conjunto”, dijo el dirigente del PSG.

EFC se renombra con más de 800 miembros de 55 países y como una voz unificada de los clubes europeos, que se sienten más poderosos que nunca después de haber pasado años de verdadera incertidumbre tras el estallido de la Superliga.

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