Los All Blacks inspiran a La Roja

España va con una inspiración extra por el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. El equipo español se ha contagiado de la magia de la cultura Maorí. Esa que lleva en volandas a los All Blacks a la cima mundial. El hogar de La Roja en tierras neozelandesas ha sido Palmerston North, ubicado a unos 150 kilómetros de Wellington, la capital.

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A pesar de no ser el centro ni acoger a la mayoría de la población, tiene algo muy importante. El Museo Nacional de los All Blacks. El Te Manawa Museum (en maorí significa el corazón) fue ubicado estratégicamente en esta localidad. La razón, para que no estuviera en ninguna de las dos urbes más importantes del país, sino en el centro de la isla. Quien quiera visitarlo, tiene que venir hasta Palmerston.

“Deporte de bestias jugado por caballeros”

No fue casualidad que la Selección eligiera esta casa. Necesitaba contagiarse de los valores del rugby: ‘el deporte de bestias jugado por caballeros’. Contagiarse de las creencias de lo que conlleva implícito una haka maorí. “Es una demostración feroz del orgullo, la fuerza y la unidad de una tribu”. Con esa sensación de tribu avanza España en el torneo, una fuerza extra además de la que trae de casa, esa calidad innata en el deporte rey.

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“El haka o la haka es una antigua danza de guerra maorí que se usaba tradicionalmente en el campo de batalla. También cuando dos grupos se reunían en paz”, la definen cuando recorres los pasillos de la galería de Arte y Ciencas de Palmerston. Estanterías llenas de tesoros. De pelotas en forma de óvalo, esas que actualmente tienen cuatro paneles y que pesa cada una de ellas 400 gramos. Las primeras fueron hechas con vejiga de cerdo. Un sito con magia que no olvidará nunca La Roja. La magia de los All Blacks y de jugadores históricos como Lomu. Un ejemplo e inspiración para las españolas a miles de kilómetros de casa.