Japón quiere pescar en el río revuelto de la selección noruega
Las tensiones en el vestuario han condicionado la primera fase de las de Hege Riise. es una incógnita el plan japonés para afrontar este vital choque de cuartos ante Noruega.
Japón se ha convertido en el equipo a batir de este Mundial. La selección que dirige Ikeda ha demostrado tener más registros que Dani LaRusso, el pupilo del señor Miyagi en Karate Kid. Si ante Zambia y Costa Rica, las niponas controlaron los partidos y ganaron sin pasar apuros, ante España cambió de táctica y utilizó el recurso de La Grulla: en su versión futbolística fue un recital de contrataques, que desarboló a las de Vilda. Y todo esto sin encajar un gol. Siguiendo el símil de las artes marciales, sin recibir ni un rasguño.
Con estos antecedentes, es una incógnita el plan japonés para afrontar este vital choque de cuartos ante Noruega. Sin duda, este es uno de los grandes alicientes de este partido en el que, a priori, las niponas aparecen como favoritas (sigue el encuentro en directo en As.com).
Enfrente estará una selección noruega que tampoco tiene claro lo que va a hacer. En su fase de grupos ha ido de menos a más. Tras empezar con una derrota ante Nueva Zelanda, empató con Suiza y levantó el vuelo con una goleada a Filipinas, en el último partido de la serie.
Sin embargo, los problemas entre bastidores han sido los que han centrado los primeros tres partidos de la selección nórdica que dirige Hege Riise. La tensión del vestuario noruego quedó plasmada en unas declaraciones de Hansen, tras una suplencia, aunque luego se disculpó. Además, la seleccionadora noruega está pendiente del estado físico de Ada Hegerberg. Esta no es la mejor situación para medirse con Japón, pero no se puede infravalorar a una Noruega que sabe lo que es ser campeona del mundo.