El vuelo que nunca hubiera cogido la madre de Olga: “Vamos como locos”
La madre de la lateral izquierda de la Selección española relata a AS cómo ha sido el viaje a bordo del vuelo chárter puesto por la Federación con destino Sídney.
Un vuelo chárter en un Airbus A350 despegó el viernes a las 12:00 horas desde Madrid con destino Sídney con cerca de 150 personas a bordo entre familiares, patrocinadores y autoridades en torno a la Selección española para asistir a la gran final del Mundial que La Roja disputa este domingo ante Inglaterra (12:00 horas). Entre ellas estaba Olga García, madre de Olga Carmona, trabajadora de Transportes Urbanos de Sevilla que no había viajado a la cita planetaria porque ya había consumido sus vacaciones. Pero estará en el partido decisivo: “Me enteré de que podía ir un día antes de coger el vuelo prácticamente. Mi hija, de madrugada, me dijo que la Federación ponía un vuelo. “Tienes que venir”, tienes que venir...”.
Y lo ha hecho. No podía faltar después de que su hija fuera la protagonista absoluta de la semifinal ante Suecia, anotando el gol decisivo que dio la victoria a España en el 89′. “Cuando marcaron las suecas, pensé que nos íbamos a la prórroga, pero no me dio casi tiempo cuando de repente veo ese córner ensayado y ese zurdazo. Estaba reunida toda la familia y aquello era una casa de locos. “¡Ha marcado la nena, ha marcado la nena!”, chillábamos. Era impensable que pudiera suceder en ese minuto y que fuera mi hija la que hiciese el gol”, explica a AS todavía con tono emocionado.
Ya con el partido acabado, pudo hablar con su hija, a la que reprochó, en tono jocoso, que no le había dedicado el tanto: “Ella siempre se besa nuestro tatuaje, se lo dije, y me respondió que no pudo, que se le tiró todo el mundo encima”. Lo normal cuando se marca un gol en el minuto 89 de una semifinal de un Mundial. “También le dije que habían jugado todas fenomenal y que estaba muy orgullosa de ella”, relata.
Un viaje de última hora
Olga no pudo acompañar a su hija durante todo el Mundial porque ya había consumido sus vacaciones: ”Cuando me enteré de que podíamos viajar, casi me había ido de vacaciones, de hecho, me reincorporé un mes después, el 17 de julio. Esto es algo nuevo, de este año, que puso la Federación casi a última hora”, razona la madre de la lateral sevillana de la Selección española y el Real Madrid —el plan de conciliación de la RFEF se hizo oficial el 29 de mayo—.
No obstante, no se perderá el día más importante del fútbol femenino español. Acompañándola está el hermano mellizo de Olga, Tomás: “Aún así hubiese ido, claro. Y eso que jamás he hecho un viaje en avión tan largo. Pienso que me hubiese muerto y no habría viajado nunca a Australia. No me importa todo lo que estoy haciendo por 90 o 120 minutos. Porque nos volvemos nada más acabar. Nada de turismo. En el avión vamos como locos los familiares”.
Los vídeos desde el interior del vuelo lo demuestran: banderas, bufandas, cánticos a todo pulmón... Y una azafata, cuenta Olga, que es talismán. “Nos ha dicho que también voló con la Selección en 2010, que es una señal y que nos vamos a traer la Copa”, afirma con una ilusión que traspasa casi el teléfono: “Además, contra Inglaterra, que nos eliminó en la Eurocopa. Hay que salir con más ganas aún”. La conversación acaba con una promesa: “Si ganamos, os mandaré fotos con la Copa del Mundo”.