EUROCOPA FEMENINA | ALEMANIA 2-ESPAÑA 0
España alimenta a un ogro
Un gol tempranero de Bühl tras un fallo de Paños condicionó todo. Popp sentenció de cabeza. No fue esa España reconocible, Se la jugará contra Dinamarca el sábado.
España se llevó un golpe de realidad ante Alemania. Era su gran oportunidad para hacer girar la historia y ganarlas de una vez por todas. Pero no fue así. Como pasó en el primer partido, un gol tempranero condicionó todo. Esta vez el rival era de enjundia, y a pesar de intentarlo, solo se consiguió que la derrota se quedara en 2-0. Una de las claves fue la inactividad de las jugadoras del centro del campo de España. Si no hay tiqui-taca, no hay espectáculo.
Para frenar a las alemanas Vilda decidió mover todo el bloque. No es habitual en él, por lo que la apuesta era fuerte. Era el momento perfecto para dejar atrás la historia y ganar de una vez a las germanas. Dejó a Esther en el banquillo, la delantera titular de La Roja, para meter una jugadora con un perfil más defensivo. Sheila, a pesar de haber iniciado su carrera como extremo, en la actualidad actúa de lateral. Lucía fue la delantera.
El otro cambio en el once vino en el centro del campo. Ante Finlandia el técnico apostó por Irene Guerrero para sustituir a Alexia y esta vez compuso un trivote con Laia. A la central esta vez la tocaba salir de la zona de confort. Reciclarse o morir. Parecía que salía España más ordenada, pero nada de eso. En el minuto tres un fallo al querer jugar de Paños le dejó el gol en bandeja a Alemania. Bühl, sin contemplaciones, lo envió al fondo de la red.
Lo peor se volvía a repetir, tocaba remar y mucho. La diferencia es que esta vez estaba el ogro de la Eurocopa enfrente. Y vaya ogro, de esos que no te deja un metro para subir el balón. Hubo espacio para alguna contra. En una de esas Guijarro dio un pase al hueco para Lucía que se quedó sola delante de la portería. El balón se le escapó por poco, tras regatear a la guardameta. En la siguiente fueron Sheila y Aitana las que iniciaron la jugada.
España estaba dónde le gusta estar. Ona se volcaba, Patri lo intentaba desde lejos. Mariona tuvo una gran ocasión con una volea casi perfecta. Y si había algún desajuste estaba Paredes. Una y mil veces. Aitana era la jugadora más desactivada. Y no hay que olvidar lo que significa la centrocampista en este equipo. Ahora mismo el cerebro de este equipo. Había que buscar a Miss MVP, con ella todo mejoraría.
Eso sí, ante su falta de presencia cogieron la iniciativa por la banda derecha tanto Ona como Sheila. Las alemanas sufrían y mucho cada vez que ambas se ponían a correr por ese lateral. Sin embargo, en un córner fue Alemania la que asestó el segundo golpe a La Roja. Y fue duro, de los que deja marca. Popp remató a placer ante el barullo en el área pequeña. Es para estudiar que no estuviese bien marcada la veterana delantera, un emblema en las teutonas.
El miedo se apoderó de las españolas. Había que reiniciar la máquina, el descanso debía servir esta vez para eso. Alemania decidió encerrarse aún más si se podía. Y cuando todo el equipo de España estaba volcado iba a matar. En una de esas pudo venir el tercero. Del lado español, estuvo mucho más incómodo el asunto. Otra vez Lucía pudo quedarse sola delante de Frohms, pero la guardameta alemana fue más veloz. Se le acabaron las oportunidades a la del Athletic y le llegó la oportunidad a Pina. Luego se sumaron Cardona y Athenea. Vilda puso toda la carne sobre el asador. Ni por esas. A la Selección le toca jugársela en el último partido de la fase de grupos ante Dinamarca. Ahí toca recomponer sensaciones. Toca volver a ser esa España reconocible que todos temen. Lo de hoy ya es agua pasada. Alemania sigue siendo el gran ogro de La Roja.