El análisis del rival: un equipo que aprendió a resistir

Campeonas de Europa. Inglaterra llegaba a este Mundial como una de las favoritas. Actuales campeonas de Europa y cuartas en el ránking FIFA, las Lionesses quieren hacer historia en Australia. Es la primera final mundialiesta de las británicas que cuenta con la experiencia de la final continental del año pasado en Wembley y han demostrado una gran capacidad para adaptarse a todos los problemas que han surgido. No son el equipo apisonadora del trofeo europeo, pero siguen siendo muy fiables en defensa y con muchas alternativas en ataque.

Sarina Wiegman. La entrenadora neerlandesa es una de las claves de esta selección. Desde que aterrizó en el banquillo inglés sólo ha perdido un encuentro, un amistoso contra Australia, y ha llegado a las Lionesses a dos finales consecutivas. Se nota su mano en todo: el trabajo táctico, la capacidad de reacción, saber sacar mucho rendimiento a sus jugadoras y saber sobreponerse a todos los obstáculos en el camino. Wiegman ha tenido que reiventarse en este campeonato. Con un equipo marcado por las bajas importantes (Beth Mead, Leah Williamson o Fran Kirby) después de que frente a Haití y Dinamarca, a pesar de ganar por la mínima (1-0), la lesión de Walsh ante las danesas y las malas senesaciones obligaron a la seleccionadora a mutar del 1-4-3-3- al 1-3-5-2 que ha usado en los tres últimos partidos de eliminatoria. Una versión camaleónica del equipo que ha conseguido llegar a la final, sin brillo, pero con sobriedad.

Earps. La portera es una de las sensaciones de Inglaterra. Ya lo fue en la Eurocopa y le valió para ganar el premio The Best el año pasado. En este Mundial vuelve a ser una de las jugadoras más importantes. Sólo ha concedido tres goles en seis partidos disputados y tiene una media de 1,8 paradas cada 90 minutos. Una portera completa, que se le da muy bien el uno contra uno, tiene muchos reflejos y segura por alto. Es el muro inglés.

La sociedad Walsh -Stanway. Son las dos centrocampistsa que llevan el peso de Inglaterra durante los partidos. La del Barcelona está siendo la estrella de las Lionesses después de ganar el MVP de la Eurocopa el pasado curso. Una pivote que no escatima nada en el trabajo defensivo y con una gran capacidad de creación. Mientras, Stanway es más creativa y con más llegada además de un excelente tiro exterior. Es más, Inglaterra es de las que más prueba los tiros desde fuera del área con un promedio de 3,3 tiros por partido.

James. La extremo del Chelsea se ha tenido que adaptar al carrilero, desde donde ha dejado grandes sensaciones. Tres goles y dos asistencias en cuatro partidos, porque se perdió cuartos y semifinales por una sanción. Su alineación de inicio o bien en la segunda parte es la gran duda. Su carácter, esfervecente, puede ser un gran arma para España si sabe aprovecharlo.

Intensidad y presión. A Inglaterra también le gusta tener el balón y, para ello, tiran de su gran físico. Una alta presión tras pérdida y sobre todo una gran intensidad desde el inico para amedrentar a sus rivales es una de sus características. Sin embargo, y a pesar de su gran despliege físico, Sarina no es amiga de hacer muchos cambios. La seleccionadora ha usado 17 jugadoras en el campeonato con seis futbolistas aún sin debutar. Cinco futbolistas han sido titulares los seis partidos y dos más han jugado todo los duelos. Buscar la espalda de las centrales, que no son demasiado rápidas, crearía muchos problemas a las Lionesses.