Edna, de la guerra a medirse contra el Barcelona
La jugadora nigeriana llegó a España en patera. Ahora disfruta de ser futbolista profesional en el mejor momento de su carrera.
Floren Imade es la verdadera heroína de esta historia. Embarazada de dos bebes, decidió que quería un futuro mejor para sus hijos. Así que, en medio de un conflicto armado en Nigeria, se lanzó a buscar su futuro en España. De su valentía y resiliencia nació Edna Imade (2000).
“La que lo ha vivido ha sido mi madre. Quería salir de Nigeria porque la situación estaba muy mal. Iba a tenernos y no quería eso para nosotros”, explicó en una entrevista a su exclub, el Cacereño. Floren cruzó el Sáhara y se quedó en Marruecos hasta que pudo coger una patera a España. Fueron tres meses en los que nacieron los mellizos, Edna y Paul. Momentos complicados en los que nadie la quería porque con dos bebés no permitían el descanso a los demás: “Cogió una patera, me ha contado historias cuando ha estado en Marruecos, le echaron por que llorábamos. Era muy duro”, explicaba la futbolista del Granada. Su marido fue deportado y con dos niños recién nacidos tuvo que buscarse la vida para que salieran adelante.
“Consiguió venir en patera. A mi padre le encarcelaron y al cabo de unos días lo reportaron a Nigeria, no se por qué”, relataba mientras ella y su hermano estaban en Algeciras: “Nos mandaron a un convento de monjas para vivir allí. El padre Isidoro nos acogió en Algeciras. Fuimos a Sevilla, con tres o cuatro años. Allí recibimos ayuda de Cáritas y la Cruz Roja. Nos mudamos a Carmona y ya ahí he estado toda la vida”. Asentados en la ciudad sevillana, la pasión por el fútbol cambió la vida de Edna.
“Mi madre veía que las niñas se apuntaban a gimnasia o flamenco. Yo le dije que no me gustaba. Estuve dos días en flamenco y no me gustaba ponerme los tacones, no me gustaba nada”, contó entre risas. Entonces encontró su vocación en el colegio. Allí jugaba con los niños en el patio y el profesor de educación física se dio cuenta de que había mucho talento: “El profesor de educación física me dijo que jugaba bien y que si me apuntaba al equipo y empecé a jugar”.
Su progresión quizá no fue tan meteórica, pero viviendo en Carmona y sin demasiados recursos, disfrutar del fútbol ya era suficiente: “A final de curso le dijo a mi madre que jugaba muy bien y que podía apuntarme al equipo de chicos de Carmona”. " Estuve varios años jugando con chicos en el Carmona, con 14 años me dijeron que ya no podía jugar con ellos. Me apunte al fútbol sala en el Santa Ana y estuve unos años y marqué muchos goles”, explicó. Sin embargo, no empezó siendo esa delantera determinante que es ahora: “Empecé de central, era alta y corpulenta”.
Parecía que su futuro estaba en el fútbol sala. Pero, de nuevo, la vida le dio un giro: “Me apunte a un torneo que se llama Tapia Cup en Málaga. Allí me dijeron que yo valía para fútbol once y llegué al Nervión. Ahí ya jugaba de delantera centro o extremo, marque casi cien goles en ese tiempo, en dos años. Me contactó un representante y al año siguiente me fichó el Málaga, estuve dos años” y en el tercer año como profesional llegó al Cacereño.
Ahora Edna lidera el ataque del Granada que se enfrentará a un Barcelona intratable. Pero sin alguien entiende de imposibles es la delantera rojiblanca...
El Barcelona, con rotaciones
El Barcelona afronta este duelo en otro día de fiesta en el Johan. La renovación de Aitana se celebrará con la de Sant Pere de Ribes sobre el campo. Sin embargo, Pere Romeu hará rotaciones un día más.
Gemma Font podría entrar en el once, igual que Jana, Brugts, Pina o Graham, que no salió de inicio contra el Sevilla. Con un pleno de victorias en lo que va de temporada, el conjunto azulgrana busca seguir sumando minutos y sensaciones positivas.
Por su parte, el Granada llega con ilusión y el reto de competir, como ya lo hizo en sus visitas al Atlético y Athletic, dos equipos potentes de la categoría. El entrenador no podrá contar con Sandra Estévez, que sufre un esguince de grado dos en su tobillo derecho. Así que Laura volverá a ocupar la portería y, posiblemente, el técnico refuerce el centro de la zaga con la entrada de Carrasco o Isa Álvarez.
Un partido especial para Ari Mingueza y Ornella Vignola. Ambas regresan a la que fue su casa y donde llegaron a debutar en el primer equipo. De hecho, una de las dudas del preparador es si entra Ornella como referencia o vuelve a confiar en Edna, que viene de anotar un doblete contra el Eibar que le dio a las rojiblancas la primera victoria de la temporada.
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