Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

REAL SOCIEDAD 0-CÁDIZ 0

El Cádiz aumenta las dudas de la Real

Los txuri-urdin, nuevamente irreconocibles, pinchan contra un rival que, con orden defensivo, es capaz de desactivarles completamente para llevarse un valioso punto del Reale Arena

Empate a nada en el Reale Arena entre la Real Sociedad y el Cádiz. Los locales porque definitivamente no están. Los visitantes porque no quisieron, se dedicaron precisamente a que no se jugara, y la jugada les salió bien porque realmente el partido transcurrió por los derroteros que ellos quisieron. Sergio González supo leer la desesperación de la Real y con su entramado defensivo le terminó de desesperar todavía más. Y es que tuvo hasta la mejor ocasión de toda la segunda parte, con un remate al palo de Roger. Se limitó a hacer su partido, impidió jugar a la Real como premisa absoluta y por todos los medios, y se lleva un punto que vale oro en su lucha por salvar la categoría.

Y la Real… la Real ya no es la Real. No al menos la Real que había maravillado a todo el mundo en la primera vuelta. Ha perdido su duende y ya no tiene fluidez con balón, porque le cuesta mucho generar peligro a través del juego. Es inexplicable cómo se ha caído el equipo donostiarra en los últimos partidos, repleto de dudas y temores. Unas dudas que se palparon en Mestalla y se han confirmado en el Reale Arena. El Cádiz las ha aumentado. Sólo ha sumados seis puntos en los últimos seis partidos. Y todo le llega en el peor momento, en el más decisivo de la temporada, a las puertas de la exigente eliminatoria europea contra la Roma. O reacciona, o el sueño de la Champions puede convertirse en pesadilla. Está a tiempo, desde luego.

En la primera parte fue la Real Sociedad la que intentó llevar la manija del partido. Pero se quedó en eso, en un intento, porque realmente no lo llegó a conseguir. O no al menos como pretendía. Porque el Cádiz le hizo el partido muy incómodo, con una presión intensa, sin dejar jugar entre líneas a los hombres interiores de la Real y evitando espacios a la espalda de su defensa. No le hacía falta mirar a la portería de Remiro, porque no era su objetivo. El único fin del equipo de Sergio González en el Reale Arena era hacer la vida imposible a los de Imanol Alguacil, para hurgar en la herida de las extrañas dudas que le han entrado con balón de manera injustificada. Y la verdad es que lo estaban consiguiendo, hasta que llegó la única ocasión clara de toda la primera parte, un remate con el exterior de Carlos Fernández después de una buena maniobra dentro del área. Y nada más.

Mucha voluntad, mucha actitud y mucha posesión, pero sin ningún sentido, totalmente estéril. El partido se jugaba más a lo que quería el Cádiz, a lo que le convenía a los de Sergio, que a lo que pretendía la Real, cuyo fútbol era demasiado lento y previsible. El fútbol brillaba por su ausencia, porque era lo que buscaban los gaditanos, que lograron desactivar todo el arsenal ofensivo de una Real tímida y timorata, con miedo, que con el paso de los minutos empezó a ser presa de los nervios, de ese gol que no llegaba para romper la tela de araña que empezaba a poner delante de su área el Cádiz. Oyarzabal no llegó a un pase interior de Kubo, y ahí se le fundieron los plomos a los de Imanol y se les acabaron las ideas. Es increíble lo poco que generan cuando juegan delante de su afición. Es como si el botón se pusiera en Off de manera automática… e incomprensible.

El Cádiz jugaba su partido, con sus armas, no las más vistosas y convencionales, pero sí efectivas y tan validas como las de la Real, aunque en este caso brillaron por su ausencia todo el partido. Los gaditanos se replegaron Liu bien, se juntaron mejor y salieron como leones cuando olieron la sangre de su presa miedosa. Así llegó la mejor ocasión en toda la segunda parte, que fue del bando gaditano. Un contragolpe fatal defendido por una defensa realista sobrepasada que terminó a trancas y barrancas en los pies de Roger Marti, cuyo disparo acabó pegando en el palo. La grada de Anoeta se quedó helada.

Y ni la salida de David Silva pudo reactivar a una Real sin ideas, ni fue capaz de calentar el ambiente, ya de por sí frío por lo que estaba ofreciendo su equipo, demasiado poco como para pensar en ganar un partido en casa. Ni el arreón de casta y orgullo del tramo final sirvió de algo. Ni con corazón fue capaz de poner en apuros al Cádiz, aunque fue cuando más cerca estuvo del gol. Ni con los 11 minutos de añadido. La Real no está. Y el Cádiz lo supo aprovechar para llevarse un valiosísimo punto del Reale Arena.

Cambios

Alexander Sørloth (60', Carlos Fernández), David Silva (60', Brais Méndez), Sergi Guardiola (61', Fede San Emeterio), Rubén Alcaraz (61', Álex Fernández), Iván Alejo (61', Théo Bongonda), Chris Ramos (77', Roger), Momo Cho (80', Mikel Oyarzabal), Álex Sola (80', Andoni Gorosabel), Jorge Meré (87', Fali)

Tarjetas

Arbitro: Antonio Miguel Mateu Lahoz
Arbitro VAR: Santiago Jaime Latre, Xavier Estrada Fernández
Fede (52',Amarilla)

Clasificación
Clasificación PT PJ PG PE PP
1 59 23 19 2 2
2 52 23 16 4 3
3 44 24 13 5 6
4 42 23 12 6 5
5 40 23 12 4 7
Clasificación PT PJ PG PE PP
12 27 23 6 9 8
13 27 23 7 6 10
14 26 24 6 8 10
15 25 23 6 7 10
16 25 23 7 4 12