Una ronda en vasos comunicantes
Míchel recibe esta noche al club de su vida y Francisco regresa a Montilivi. Como técnico rojiblanco vivió dos playoff de ascenso fallidos, ante Elche y, precisamente, contra el Rayo.
La Copa del Rey empieza a entrar en las fases calientes y el destino, demasiadas veces caprichoso, quiso juntar en estos octavos de final a Girona y Rayo Vallecano (sigue el partido en directo en As.com). Montilivi será testigo de un nuevo envite entre dos clubes que se conocen muy bien y cuya historia parece ligada en los últimos años. Como mínimo, en esta ronda van a beber, sin duda, de vasos comunicantes. El motivo es que Míchel, técnico del club gerundense, hará de ‘anfitrión’ para el equipo de su vida, el Rayo; y Francisco, actual entrenador vallecano, regresa a la que fue su casa, Montilivi, durante algo más de una temporada. Es la primera que vuelve a Girona tras su salida al final de la campaña 2020-21. El punto y final, precisamente, lo puso con su segunda final fallida de playoff de ascenso: la bestia negra fue el Rayo que ahora dirige.
En Girona, como no, se recuerda a Francisco con cariño porque recogió al equipo, a falta de seis partidos de Liga, la temporada 2019-20 (ese curso fue el cuarto técnico tras Unzué, Juan Carlos Moreno y Pep Lluís Martí) y lo llevó hasta la final del playoff. En esa primera campaña solo perdió dos partidos: el de la última jornada de Liga ante el Alcorcón y el de vuelta de la final del playoff contra el Elche. Fue el primero de los dos grandes varapalos (el segundo llegó con la otra final perdida, ante el Rayo) que se llevó y ya no quiso que hubiese un tercero. En total, dirigió al equipo gerundense en 60 partidos y sus números, entre Segunda, playoff de ascenso y Copa, fueron notables: ganó 30 duelos, empató 15 y perdió otros 15. Datos para enmarcar, que claro, ahora se están quedando en nada con un Míchel que está haciendo historia. El vallecano recogió el testigo de Francisco, subió al Girona a Primera en su primer año, en el siguiente selló la permanencia rozando Europa y ahora, en el tercero, tiene al equipo líder y esta Copa del Rey es ideal para soñar con el doblete. Los gerundenses, eso sí, nunca han pasado de cuartos de final en esta competición y por ello, eliminar al Rayo Vallecano es el objetivo de este miércoles. Si algo tiene Míchel es humildad y no quiere desviarse del camino ni del “partido a partido”.
Claro está que con un Girona-Rayo es inevitable no dirigir gran parte de las miradas hacia Míchel. Y es que el técnico tiene un idilio con el club de Vallecas porque más allá de ser del barrio y sentir La Franja, todo apunta a que tarde o temprano volverá. Pero de momento, defiende el escudo de un Girona que siente como suyo y va a tratar de catapultarlo todavía más. Míchel quería una eliminatoria en Montilivi y la va a tener. El problema es que si la Copa mola e ilusiona en el vestuario por la posibilidad de hacer el doblete, entre la afición no está acabando de enganchar. Que este duelo sea a las 21:30 de un miércoles ayuda poco, aunque tampoco lo hace que los socios y abonados rojiblancos tengan que pasar por taquilla. El ambiente distará, mucho, de lo que se vive en Liga. Mientras que para los dos próximos duelos ligueros en casa (ante Sevilla y Real Sociedad) ya se ha colgado el cartel de “entradas agotadas”, para este miércoles se han retirado poco más de 6.500 entradas. Tocará apurar el vaso.
El Girona juega en casa; el Rayo ha tenido más descanso
El Girona buscará hacer bueno el factor campo. Será el primer encuentro de la presente edición de la Copa del Rey en Montilivi y Míchel espera que su equipo siga mostrándose fiable. En lo que se lleva de curso solo han perdido un encuentro, ante el Real Madrid. Para este partido, el entrenador no podrá contar con los lesionados Eric García, David López, Borja García, Jastin, Artero, Toni Villa y Joel Roca, aunque sí están en disposición de acumular minutos de calidad, e incluso ser titulares, futbolistas como Tsygankov y Yangel Herrera. Además, en la convocatoria estarán los centrales del filial Monjonell y Antal. En cuanto al Rayo, tiene a su ‘favor’ que ha tenido más tiempo para preparar este duelo. Y es que lleva 11 días sin jugar. Aunque es un arma de doble filo porque ahora se desquitará dado que en 72 horas pasará de esta eliminatoria de Copa a su estreno liguero en 2024, ya que el partido de la pasada jornada contra el Atlético se aplazó por la Supercopa. En cuanto al equipo, Francisco tiene varias dudas. Está pendiente de la evolución de dos de sus jugadores clave, como Trejo y Álvaro, aunque ya ha recuperado a Kike Pérez para la medular. Una demarcación en cuadro por la baja de Pathé Ciss, que se encuentra junto a Bebé en la Copa de África.
Una eliminatoria al “50 por ciento”
Míchel, en su conferencia de prensa previa al duelo, explicó que la eliminatoria estaba al “50 por ciento”. Puede tener razón, pero lo que es seguro es que el último precedente cayó del lado vallecano. El 15 de enero de 2022, Girona y Rayo Vallecano también se enfrentaron en los octavos de final y el Rayo se impuso con un 1-2 gracias a que el doblete de Sergi Guardiola hizo estéril el tando de Bernardo. Míchel lucía en el banquillo gerundense e Iraola, en el vallecano. No ha pasado demasiado tiempo, pero aquella temporada acabó siendo de felicidad para ambos. El Girona logró el tan anhelado ascenso a Primera y el Rayo, la permanencia. De aquel duelo quedan algunos supervivientes. Que participaran en aquella eliminatoria copera, en el Girona, quedan Juan Carlos, Arnau, Juanpe, Kebe, Borja García y Stuani; y en el Rayo, Balliu, Óscar Valentín, Ciss, Bebé, Isi, Falcao y Trejo.
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