Xavi, entre la autocrítica y el pragmatismo
“Nos faltaron piernas en la segunda parte, nos ganaron todos los duelos”, asumió el técnico a nivel interno, que buscará ‘agitar’ el dibujo táctico de cara a la final ante el Inter.
Xavi Hernández acabó el partido ante el Celta con sensaciones muy contradictorias. Por una parte, satisfecho, ya que el equipo mantenía el liderato y llegará al Clásico en lo más alto, pero, por otro lado, preocupado, sobre todo tras la nefasta imagen en la segunda parte, donde el equipo perdió totalmente el control del partido.
Este contraste de emociones se tradujo al día siguiente en un día de profunda reflexión por parte del entrenador y su staff. Algunas de las conclusiones que se llegaron no dejan lugar a dudas que hay que remover el avispero de cara al partido del miércoles. Y esta revolución podría pasar directamente por reforzar el mediocampo con un hombre más. “Nos han ganado todos los duelos en la segunda parte, nos han faltado piernas”, fue uno de los mantras que más se escuchó este lunes en los despachos de la Ciutat Esportiva.
El elegido para reforzar el físico y el talento en la medular tiene nombre y apellido: Frenkie de Jong. Tras jugar ante el Celta casi media hora, su titularidad en el partido más importante de la temporada se da por casi asegurada. La duda es si será formando una línea de tres en el mediocampo o desplegándose con cuatro centrocampistas.
Teniendo en cuenta que el ímpetu de Gavi es innegociable en partidos de este calado, y que Sergio Busquets y Pedri son innegociables, todo apunta que la apuesta de cuatro centrocampistas va ganando enteros. Y más aún ateniendo al espíritu que ha transmitido el técnico a sus jugadores nada más acabar el partido ante el Celta: “Vamos a ser valientes e ir a por ellos”.
Pero esta valentía e ímpetu se ha de desarrollar con sentido común y sin hacer la guerra cada uno por su cuenta. De ahí que Xavi haya insistido en la importancia de encontrar y buscar al mejor delantero del mundo, Robert Lewandowski, y darle todos los recursos posibles para generar ocasiones de gol. El papel de los interiores y los extremos será fundamental en este sentido.
Pero la autocrítica en el vestuario tampoco ha dejado pasar un cierto grado de satisfacción, ya que Xavi ha querido también recalcar el espíritu de sacrificio y sufrimiento de su equipo, que es capaz de salir airoso y sacar los partidos adelante, pese a no completar buenos partidos. “Los equipos campeones también son los que jugando mal se llevan los triunfos”, recalcó a sus pupilos este lunes antes de empezar el entrenamiento matinal.
En cualquier caso, el vestuario es consciente que si el equipo sigue jugando con fuego se acabará quemando. De ahí que el partido ante el Inter se presente como un punto de inflexión, donde el equipo ha de dar un paso adelante y demostrar hasta dónde está dispuesto a llegar.