Valverde: “Vernos el 24º es jodido; el Madrid no está acostumbrado a pasar por estas situaciones”

“Es jodido verse aquí”, asumía Fede Valverde, con media sonrisa, al ser cuestionado sobre la posición del club a estas alturas de la Champions. Palabra de unos de los capitanes. No sólo por brazalete, también por responsabilidad. Lo asume. Fue el encargado de hablar en Múnich, en la pasada Champions. También en Arabia, por la Supercopa de España. Dos días D. Y mañana lo es. Porque una derrota empantanaría un rumbo ya tortuoso. Mucho. Por eso, tuvo clara la receta: “No estamos acostumbrados a atravesar estos momentos; siempre estamos arriba. Pero toca tener tranquilidad, asumir que es parte del fútbol, del proceso y confiar en el trabajo”.

Rueda de prensa

¿Cuál es la clave para mañana?

Llegamos en una situación a la que no estamos acostumbrados y la única forma de cambiar el tercio es saliendo al campo al máximo, demostrar todo lo que hemos trabajado estos días. Contundencia atrás y eficacia arriba. Sabemos que la Atalanta puede marcar al hombre, pero eso nos puede beneficiar por los jugadores que tenemos. Pensemos en eso.

¿Cómo se le pone el cuerpo al mirar la tabla y verse el 24º?

Es jodido, obviamente. Porque no estamos acostumbrados a atravesar estos momentos; siempre estamos arriba. Pero toca tener tranquilidad, asumir que es parte del fútbol, del proceso y confiar en el trabajo. Ojalá que al final de la temporada disfrutemos de títulos. Pese a ganar tanto, debemos tener los pies en la tierra.

La Atalanta lleva nueve victorias seguidas y presiona muy, muy alto, como el Athletic... ¿Aquello sirvió para aprender?

Lo de San Mamés, a mí, me sirvió muchísimo. Para mejorar, aprender, que no vuelva a suceder un error así. Será un equipo que nos pondrá en muchas dificultades y que nos pondrá hombres muy encima, pero tenemos gente muy rápida y hábil. Somos jugadores hechos para estos partidos.

¿Cómo se ve personalmente? ¿Ha hablado con Kroos en estos cuatro meses?

No, no. No hemos hablado mucho. Muy poco, o casi nada. Pero tengo todos los consejos que me ha dado estos años. No lo puedo joder mucho más. Me toca a mí. Y no puedo pedirle consejos como lateral... ¡Ya sería demasiado! Yo quiero ser servicial para el equipo, dar el máximo donde me pongan y necesitan. A veces no me salen los partidos como querría... y en San Mamés cometí un error que costó el partido, algo que no me había pasado en toda mi carrera. Costó dormir esa noche, pero son cosas del fútbol. Lo importante es salir adelante y demostrar que, como uno de los capitanes, puedo ser un ejemplo.

Ancelotti dijo que estaba recibiendo demasiados palos... ¿Lo comparte?

Bueno, es parte de nuestro trabajo. Alguna vez nos pondréis en un altar y eso es lindo... pero cuando las cosas no salen bien, parece que son los peores días de nuestras vidas. No es fácil, pero hay que saber convivir con esto. Somos un ejemplo para los niños, así que debemos superar estos momentos de la mejor manera.

¿Cómo está Vinicius? Su regreso apunta a clave...

Es bueno que regresen lesionados y, para mí, es un placer tenerlo otra vez cerca, sumando todo lo que suma: alegría y fútbol. Hambre. Es una satisfacción y una alegría tremenda que pueda estar mañana, aunque la titularidad será decisión del entrenador.

¿Cómo gestiona lo de ser “compactos”? Parece que está costando...

Las alineaciones son culpa del entrenador. Es la persona que elige al equipo. A nosotros nos toca dar el máximo, sea la formación que sea. Aportar nuestro granito de arena. A mí, como medio, me gusta jugar con delanteros que lleven mucho el balón hacia adelante y menos hacia atrás. Los medios buscamos que miren a la portería rival y menos a defender.

La última vez que no jugó fue el 11 de mayo... ¿Por qué usted nunca para? ¿Necesita un descanso?

¡No! Yo quiero seguir jugando. Uno intenta descansar y alimentarse bien, para estar recuperado el próximo día. Claro que, a veces, la cabeza puede explotar. Tras San Mamés, por ejemplo, me costó mucho dormir, porque no estoy acostumbrado a vivir estos momentos. A mí mujer le decía que podía estar un poco cansado psicológicamente y ella me dijo que nada de hundirse, que soy un capitán y debo poner el pecho a todo esto. Mi prioridad es que el equipo vea que, por más que haya errores, siempre hay que salir adelante. Es un orgullo vestir esta camiseta, defender al mejor equipo del mundo.

Sólo Rüdiger ha jugado más que usted... ¿Cuál es su secreto?

Disfrutar al máximo de defender este escudo, jugar para esta afición. Para mí es un orgullo tremendo. Claro que hay días en los que estoy cansado, pero quiero que, el día que me retire, mis hijos vean todo lo que pude aportar al Real Madrid. Que mis padres estén orgullosos. Yo quiero jugar siempre.

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